El cianuro (del griego, kyanos, 'azul oscuro' ) es un anión monovalente de representación CN-.
Los compuestos orgánicos que poseen grupo funcional -C≡N adosado a un residuo alquilo son denominados nitrilos según la nomenclatura IUPAC.
Se describe con un olor fuerte a almendras amargas, pero no todas las personas pueden detectarlo, pues está comprobado que la capacidad de detectarlo está en un gen recesivo asociado al cromosoma X femenino.
[cita requerida] El cianuro de hidrógeno [H-C≡N(g)] o ácido cianhídrico [H-C≡N(ac)], ácido prúsico, metanonitrilo o formonitrilo es un compuesto químico cuya fórmula es: HCN.
El cianuro de hidrógeno puro es un líquido incoloro, muy venenoso y altamente volátil, que hierve a 26 °C, es ligeramente ácido y sus sales son conocidas como cianuros; es miscible con el agua, dando el ácido cianhídrico que es un ácido débil (pKa 9.3), el cual es un líquido incoloro con un olor característico a almendras amargas, en el Cuadro 1 se presentan propiedades físicas de algunos cianuros.
El enlace triple C≡N- es fácilmente hidrolizado por álcalis fuertes ácido fórmico y amoníaco, una temperatura más alta favorece estas reacciones .
[cita requerida] Esto produce una gran cantidad de cargas que generan suficiente energía como para que el AMP (Adenosín monofosfato) cíclico se pueda convertir en ADP (Adenosín difosfato), creando una sobreestimulación en varios procesos.
Las sustancias químicas encontradas en productos hechos a base de acetonitrilo, utilizados para quitar uñas postizas principalmente, pueden liberar cianuro si se ingieren accidentalmente y como consecuencia producir la muerte por paro cardiorrespiratorio.
[cita requerida] El cianuro no es persistente ni asfixiante, ya que en la naturaleza se destruye por acción de la luz solar (por medio del ozono), descomponiéndose por oxidación en gases de tipo COx y NOx.
Creando cloratos y nitritos muy utilizados en la purificación del agua contaminada con plomo.
Para la destrucción industrial del cianuro se utilizan cuatro métodos: degradación natural, oxidación química, precipitación y biodegradación.
El uso industrial y minero del cianuro debe ajustarse a normas estrictas, como las que aconseja el Consejo Internacional de Metales y Medio Ambiente, con sede en Ontario, Canadá (2012).
Una de las principales preocupaciones para la salud y el ambiente relacionados con los productos químicos sintéticos es que no se descomponen rápidamente y por lo tanto, pueden acumularse en la cadena alimenticia; sin embargo, el cianuro se transforma en otras sustancias químicas menos tóxicas mediante procesos físicos, químicos y biológicos naturales, dado que el cianuro se oxida cuando es expuesto al aire o a otros oxidantes, se descompone y no persiste.
Aunque es un veneno mortal cuando es ingerido en una dosis suficientemente elevada, no causa problemas crónicos en la salud o en el ambiente cuando está presente en concentraciones bajas.
Precursores del cianuro se encuentran en forma natural en algunos alimentos como las almendras, las nueces, las castañas,[4] las semillas de frutas como los melocotones, las ciruelas, los albaricoques, la manzana, las peras o la uva, en el cazabe,[5] la raíz de yuca.
Entre ellos se encuentra la amigdalina, un compuesto de glucosa, benzaldehído y cianuro, en concentraciones que oscilan entre los 377 y los 2,50 mg por kg, y que bajo la acción de una enzima llamada emulsina se descompone, produciendo ácido cianhídrico.
El cianuro de hidrógeno fue comercializado por la empresa alemana IG Farben, bajo el nombre de Zyklon B, y se usaba como pesticida en los años veinte.
Después, fue utilizado en la Segunda Guerra Mundial como arma química por los nazis.
Los cianuros provenientes de efluentes del molino de oro pueden clasificarse, grosso modo, en 3 categorías:[9][10][11] El cianuro llamado libre es el que se encuentra como HCN o CN-, y son estás especies las que están clasificadas como las más tóxicas debido a su elevado potencial de inhibición metabólica, por otra parte los complejos los metal–cianuro se consideran relativamente menos tóxicos.
La toxicidad aguda de cada complejo metal-cianuro se relaciona con la facilidad con que el cianuro puede ser disociado a cianuro libre, por lo que comparativamente los complejos más débiles serán más peligrosos (tóxicos) que complejos más fuertes .
La concentración de cianuro en esta solución se determina colorimétricamente por espectroscopia UV-VIS, mediante la conversión a CNCl por reacción con cloramina T a pH < 8.
Después que la reacción se ha completado, el CNCl forma un compuesto de color rojo-azulado al adicionar ácido barbitúrico y piridina.
El compuesto formado presenta una banda de absorción molecular entre 575 y 582 nm.