Sus ideas liberales se traslucen en todas sus actividades públicas y en polémicas que sostuvo con el clérigo conservador Bartolomé Herrera.
Allí continuó manteniendo contacto con los movimientos rebeldes de Chile y Buenos Aires.
Fue tomado prisionero por los realistas y confinado en Copacabana (Alto Perú), donde permaneció hasta la capitulación de Ayacucho (1824).
[11] En el Cuzco conoció al libertador Bolívar, que llegó a la ciudad imperial en su camino hacia el Alto Perú.
Sin embargo, dicho congreso se quedó en juntas preparatorias pues un grupo mayoritario de dichos diputados decidieron no asumir sus funciones y solicitaron a Bolívar que convocara el Congreso el año siguiente.
Jorge Basadre lo califica de «notable documento… Por la sobriedad en el estilo, la claridad en las ideas, la exactitud en los conceptos».
[1] En 1833 fue elegido diputado por Huancané ante la Convención Nacional o asamblea constituyente convocada por el presidente Gamarra, ya en vísperas de finalizar su mandato.
[24] Establecida la presidencia provisoria del mariscal Agustín Gamarra, fue nombrado ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores (1838).
Los otros ministros eran: Manuel Bartolomé Ferreyros (Hacienda) y Ramon Castilla (Guerra).
Y durante el breve gobierno del general Francisco de Vidal (del que La Fuente era sostenedor) se desempeñó como ministro de Gobierno, Relaciones Exteriores, Negocios Eclesiásticos, Instrucción Pública y Beneficencia (1842-1843).
[1][26] Estampó su firma en la orden de fusilamiento del coronel Justo Hercelles, que se había alzado en armas en el norte.
[27] En 1845, ya bajo el primer gobierno de Ramón Castilla, pasó a Chile como ministro plenipotenciario y negoció el tratado tripartito (entre Chile, Bolivia y Perú) que acordó el destierro a Europa del mariscal Santa Cruz, prisionero entonces en Chillán.
[1] En 1846 sostuvo una célebre polémica doctrinaria con el clérigo Bartolomé Herrera (rector del Convictorio de San Carlos) en torno a la soberanía.
[17] En años posteriores, su función pública se limitó al ejercicio de la magistratura en la Corte Suprema.
[1] Pero ello no fue impedimento para que siguiera defendiendo su ideario liberal a través de sus escritos.
Asociado con otros célebres liberales como Francisco de Paula González Vigil, Francisco Javier Mariátegui, José Gálvez Egúsquiza y José Gregorio Paz Soldán, fundó el periódico El Constitucional, desde cuyas páginas criticó al presidente Ramón Castilla, quien habiendo llegado por segunda vez al poder apoyado por los liberales, terminó orientándose hacia el conservadurismo, poco antes de su elección como presidente constitucional en 1858.
[36] En 1831, un año después de la muerte de su esposa, contrajo segundas nupcias en Arequipa con Petronila García-Calderón y Crespo, tía del jurista Francisco García-Calderón, quien fue presidente durante la ocupación chilena.