Hermanos Angulo

Los tres primeros encabezaron la Rebelión del Cusco de 1814, junto con Mateo Pumacahua y otros líderes patriotas.

Vicente Angulo fue investido con el grado de brigadier y acompañó a Pumacahua en la expedición hacia Arequipa, siendo el artífice del triunfo patriota en La Apacheta.

Mariano Angulo asumió la comandancia general del Cuzco con el grado de coronel y marchó a apoyar la expedición hacia Huamanga.

Preocupado por la explotación de los indígenas a manos de los coloniales, y por las corrientes ideológicas ligadas al fidelismo y a la revolución rioplatense, frecuentó las reuniones que los patriotas cusqueños organizaban en la ciudad.

Inicialmente, escribió con mesura al virrey Abascal haciéndole saber que la revolución era solo una protesta contra los abusos de las autoridades locales, pero luego declaró altivamente que aspiraba a sacudir el yugo español y libertar al país.

Dividió sus fuerzas en tres expediciones militares para extender la revolución en todo el Perú: La sorpresa inicial hizo que estas tres expediciones iniciaran triunfantes sus operaciones; pero la disciplina del ejército realista pronto se impuso sobre el entusiasmo y la improvisación de los patriotas.

José Angulo se vio obligado a huir del Cusco, pero fue capturado en Zurite por los mismos pobladores.

Tras un sumario juicio, fue ejecutado en el Cuzco el 29 de mayo, junto con sus hermanos Vicente y Mariano.

Por entonces se enroló en el ejército realista para luchar contra las fuerzas argentinas que invadieron el Alto Perú.

Ambas fuerzas antagonistas se avistaron en Apo el 5 de diciembre, pero por lo pronto prefirieron evitar un encuentro.

Mariano Angulo logró huir, pero fue apresado junto con sus hermanos y enviado al Cusco, siendo sometido a un proceso sumario.

Los hermanos José, Vicente y Mariano Angulo, líderes de la revolución del Cuzco de 1814.
Efigie de José Angulo en el Panteón de los Próceres en Lima.