Francisco de Paula González Vigil

Representó igualmente a una corriente liberal e ilustrada dentro de la Iglesia católica.

Fue elegido ocho veces diputado y una vez senador ante el Congreso de la República del Perú.

[2]​ Según el historiador Jorge Basadre, la vida de este personaje puede dividirse en cuatro etapas:[3]​ Pertenecía a una familia radicada en Tacna.

En el Seminario de San Jerónimo se le hizo la primera tonsura en 1804 y recibió los cuatro grados menores en 1810.

Por ser el alumno más brillante, se le encargó la cátedra de Gramática, así como la prosecretaría del Seminario (1811).

Aceptó, pero según su testimonio, huyó en víspera de la ordenación, al darse cuenta del trajín que le esperaba.

En 1817 enfermó, y alentado por su confesor, le vino otra vez la inquietud de ordenarse.

En 1825, siendo gobernante el Libertador Bolívar, fue elegido junto a Hipólito Unanue diputado por Arica al Congreso General de 1826 (convocado para reformar la Constitución de 1823), por lo que se trasladó a Lima.

En 1827 volvió a ser elegido diputado por Arica y se integró al Congreso General Constituyente, que dio la Constitución Liberal de 1828.

[15]​ En 1835 fue elegido diputado por tres provincias: Tacna, Arequipa y Tarapacá, pero el Congreso no se reunió por la agitación política que se desató a raíz de la sublevación de Felipe Santiago Salaverry y la invasión boliviana.

Instaurada la Confederación Perú-Boliviana, pasó a Lima, al aceptar el cargo de director de la Biblioteca Nacional del Perú que le propusiera el presidente Orbegoso (1836).

[15]​ Aunque sin abandonar del todo la política coyuntural, Vigil, como liberal radical, se consagró al estudio y la defensa de las doctrinas regalistas (derechos y prerrogativas del Estado frente a la Iglesia).

[16]​ Propugnando la autonomía del Estado y la sociedad civil respecto a la Iglesia, se abocó en escribir un libro sobre la defensa de la autoridad del gobierno y los obispos contra la pretensión de la curia romana.

[5]​ En 1866 fue elegido senador, pero se negó a asumir esta representación, sin duda por cansancio y mala salud.

[5]​ Resumiendo su vida parlamentaria, desde 1826 a 1866 fue elegido ocho veces diputado y una senador.

[23]​ A pesar de su precaria salud, tuvo una larga vida, algo que no era común en aquellos años.

[24]​ Como González Vigil era un excomulgado impenitente, al haber rechazado el perdón del obispo de Arequipa, ninguna iglesia en Lima quiso recibir sus restos.

A pesar de ser el pueblo peruano devotamente católico, no tuvo reparos en rendirle homenaje, arremolinándose hasta hacer colapsar un balcón.

Se dice también que el primer ministro británico William Gladstone conoció y aplaudió sus ideas.

También escribió obras destinadas para la enseñanza del pueblo: En otros opúsculos se ocupa sobre diversos temas, como la guerra, la soberanía nacional, el gobierno republicano, importancia y utilidad de las asociaciones, la educación popular y de la mujer, la tolerancia y la libertad de cultos, la pena de muerte (a la que se oponía), el matrimonio y el divorcio, manifestando en todo un pensamiento liberal.

Grabado que representa a Francisco de Paula González Vigil en su etapa juvenil, cuando fue diputado por Tacna.
Fotografía de Francisco de Paula González Vigil de una tarjeta de visita. Estudio Courret, c. 1865.