La Academia Lauretana fue la primera institución cultural fundada en Arequipa tras la independencia del Perú, y la primera laica.
Fue el centro cultural de la ciudad, y desde ella se impulsó la creación en 1828 de la Universidad, que nació con el nombre de Universidad Nacional del Gran Padre San Agustín.
Debía constar de 50 socios y varios catedráticos que se reunían el primer día hábil de cada mes.
Se creó una biblioteca, para lo cual Gómez Sánchez y otros socios regalaron las suyas.
Pero pronto fue acusada de revolucionaria y hasta de herética y el cabildo le suprimió la pensión de 4000 pesos que le había concedido.