Jesús Franco

[10]​ Como director[11]​llegó a filmar alrededor de 200 películas[12]​ en las que abundan las secuencias lésbicas, eróticas o pornográficas[13]​ y los géneros de cine fantástico, ciencia ficción y terror,[14]​ pero solo una vez, por cierto, el spaghetti western: El Llanero (1963).

[28]​ Interesado por la música desde pequeño ingresó, tras la guerra civil española, en el conservatorio de Madrid donde estudió piano.

También estuvo contratado, como escritor y representante, para Ágata Films S.A.[28]​ Sus primeros trabajos como director dieron como fruto películas culturales, normalmente documentales de corta duración, de temática histórica española.

[32]​ En este film aparece por primera vez el icónico Doctor Orloff, encarnado por Howard Vernon,[33]​ un científico loco que sería recurrente en películas de Franco hasta la década de los años 2010.

[36]​ Sin embargo las buenas críticas recibidas por sus trabajos de esta primera época no se materializaron en ayuda económica para que pudiera continuar.

[37]​ Su conocimiento del inglés le permitió trabajar como director de unidad secundario para Orson Welles en Campanadas a medianoche (1965).

[45]​ Las películas de Jesús Franco no siempre fueron bien acogidas por la crítica o el público.

Buena parte de la crítica y el público empezaron a rechazar o despreciar sus propuestas.

Debido a su enorme capacidad de producción en sus filmes se verifica que en ocasiones el reparto de un rodaje participaba en nuevos proyectos, utilizando el mismo material y reutilizando escenas ya rodadas, con el presupuesto sobrante del proyecto anterior.

[47]​ También se especializó en realizar dobles o triples versiones de sus películas dependiendo del mercado al que estaban destinadas.

Algunos de sus trabajos están firmados como David Khunne, John O'Hara, Clifford Brown o Pablo Villa.

Junto a Lina Romay, su compañera y posteriormente esposa, respondió con incursiones en el cine puramente pornográfico,[50]​ algo que muchos de sus seguidores tampoco supieron comprender.

[49]​ No obstante son sus películas erótico-pornográficas como Aberraciones sexuales de una mujer casada (1981),[58]​Entre Pitos anda el Juego (1985), El mirón y la exhibicionista (1986)[59]​ o el tándem Phollastía[60]​ - Falo Crest (1987),[61]​ que parodiaban en clave pornográfica las series de televisión Dinastía y Falcon Crest, las que se llevan el grueso de su trabajo.

[70]​ Posteriormente la producción de Jess descendió notablemente aunque siguió rodando hasta prácticamente su fallecimiento.

Sirvan como ejemplos Kárate a muerte en Torremolinos (2003)[75]​ o Ellos robaron la picha de Hitler (2006)[76]​ dirigidas por Pedro Temboury.

[81]​ No obstante también ejerció como productor para otros cineastas como, por ejemplo, en la única película dirigida por el actor Ricardo Palacios,[82]​ la aclamada ¡Biba la banda!

(1987),[83]​ interpretada por Alfredo Landa, Fiorella Faltoyano y Óscar Ladoire en sus roles principales.

Franco tiene acreditadas, con su nombre o bajo seudónimo, 71 bandas sonoras para diversas películas.

Jesús Franco (en silla de ruedas) en el homenaje que le brindaron en 2008 el Festival de cine fantástico de Gérardmer ( Francia ) [ 23 ]
Christopher Lee encarnó al Conde Drácula en la versión dirigida por Jesús Franco en 1970.
Klaus Kinski participó en varias películas dirigidas por Franco en las décadas de los 60 y 70. [2] .
Con Killer Barbies (1996), interpretada por el grupo homónimo, el cine de Jesús Franco volvía a la pantalla grande para una nueva generación de espectadores. En la foto Silvia Superstar, cantante del grupo punk.