Campanadas a medianoche

En 1960 revivió este proyecto en Irlanda como Chimes at Midnight, que fue su última actuación en un escenario.

Las disputas sobre la propiedad de Campanadas a medianoche han dificultado ver la película legalmente hasta fechas recientes.

El narrador explica que todos los rebeldes fueron muertos en 1408, pero la salud de Enrique ha comenzado a deteriorarse.

Continuando la primera escena de la película, Falstaff, Shallow y Silence están sentados ante el fuego.

Falstaff, exultante, va directamente al castillo, pensando que se convertirá en un poderoso y gran hombre bajo el rey Enrique V.

Hal vuelve la espalda a Falstaff y proclama que ha terminado con su antigua forma de vivir.

La coronación continúa en el castillo mientras Falstaff se aleja diciendo que será solo por esa noche.

Esa noche, Falstaff muere en la taberna Boar's Head y sus amigos lo lloran, afirmando que ha muerto con el corazón roto.

Campanadas a medianoche nació en 1939 como una obra de teatro titulada Five kings, que Welles escribió y en parte produjo.

Five kings (Cinco reyes) se anunció como parte de la segunda temporada del Mercury Theatre recién renovado en 1938.

John Houseman había comprometido una asociación con el prestigioso Theatre Guild para producir la obra por 40 000 dólares, con una gira inicial en Baltimore, Boston, Washington D. C. y Filadelfia, antes de debutar en Broadway.

Welles encargó la construcción de un escenario giratorio, pero no fue completado en las cinco semanas asignadas a los ensayos.

Esta versión, titulada ahora Chimes at midnight, fue producida por el viejo amigo de Welles Hilton Edwards, con su compañía Gate Theatre con sede en Dublín.

Welles tenía pensado representar la obra en Belfast, Dublín y Londres antes de filmar en Yugoslavia.

Welles regresó dos días antes del estreno y los actores hicieron sus primeros ensayos con vestuario, que duraban hasta las tres de la madrugada.

Según Keith Baxter, Welles puso fin a la gira de la obra porque estaba aburrido con ella.

Cinco años más tarde, Baxter fue el único miembro del reparto de la obra que aparecía en la película.

En 1964 Welles conoció y se hizo amigo del productor de cine español Emiliano Piedra, que quería trabajar con él.

Welles utilizó en la preproducción el truco de construir decorados que se podrían utilizar en las dos películas, como la taberna Boar's Head de Mistress Quickly, que serviría como la posada del Almirante Benbow.

Keith Baxter dijo que la banda sonora de la película fue doblada meses después de terminar el rodaje, y que los actores Fernando Rey y Marina Vlady fueron doblados por otros actores debido a su fuerte acento.

Baxter declaró también que él, Welles y Michael Aldridge grabaron en postproducción las voces de varios personajes.

Anderegg ha dicho que «al final, ambos ejércitos se convierten en una enorme, torpe, desintegradora máquina de guerra, un autómota grotesco cuya fuente de poder lentamente comienza a fallar y finalmente llega a su fin congelado.

Tony Howard ha escrito que Welles ha usado las obras históricas de Shakespeare «para denunciar la hipocresía política moderna y el militarismo».

Sin embargo, después de la opinión desfavorable del crítico del New York Times Bosley Crowther tras el visionado previo, el distribuidor estadounidense Harry Saltzman decidió dar a la película poca publicidad y una distribución mínima cuando se estrenó en Estados Unidos al año siguiente.

Un análisis de Time también criticó a Welles, afirmando: «Es probablemente el primer actor en la historia del teatro en aparecer demasiado gordo para el papel […] Se impone en la escenas menos por su habla inglesa que por su cuerpo de inglés», pero nunca está «del todo mal».

«Es mi película favorita, sí», dijo al entrevistador Leslie Megahey en una entrevista para la BBC Arena en 1982.

Antes del estreno de Five Kings en Boston en 1939, Welles dijo a los periodistas: «Lo interpretaré como una figura trágica.

Pero su humor y su ingenio estaban provocados por el simple hecho de que quería agradar al príncipe.

Welles afirmó: «La película no se pensó como un lamento por Falstaff, sino por la muerte de la Alegre Inglaterra (Merrie England).

Welles y Feder volvieron a conectar más tarde, pero su relación nunca se recuperó completamente.

Orson Welles en Campanadas a medianoche .
Falstaff con una jarra de vino y una copa . Eduard von Grützner (1846-1925). Representación tradicional de un Falstaff cómico y alegre, que Welles rechazaba.