Su reinado corresponde a un período de recuperación económica y florecimiento cultural en Bulgaria.
Se construyeron muchas iglesias ortodoxas y floreció el arte cortesano, especialmente los manuscritos ilustrados, surgidos en la escuela literaria de Tarnovo.
[5] Murió dejando el país dividido y débil frente al avance de los turcos en los Balcanes.
[22][23] Dečanski rehusó ceñirse la corona del Imperio búlgaro, pero demandó que su sobrino y protegido Iván Esteban, hijo del fallecido Miguel Shishman y su hermana Ana Neda, ocupara el trono, lo cual aceptaron los representantes búlgaros.
[30][31] Las continuas derrotas frente a los bizantinos causaron el descontento de la nobleza búlgara, ya que su zar era impotente para lidiar con estos problemas.
[36] El nuevo soberano se dedicó inmediatamente a consolidar su posición recuperando los territorios recientemente perdidos ante los bizantinos.
[32] Su llegada al poder ayudó a normalizar la tensa relación entre búlgaros y serbios, que mejoró manifiestamente tras la firma de una alianza entre ambos gobernantes.
[37] Los bizantinos aplastaron las defensas en Tracia, pero el zar marchó rápidamente al sur con un pequeño ejército y se encontró con Andrónico III en Rusokastro.
[37] Para sellar la alianza, el emperador bizantino comprometió a su hija, María (Irene), con el primogénito del zar, Miguel Asen IV, un matrimonio que finalmente ocurrió en 1339.
[43] Iván Alejandro se encontraba ya libre para lidiar con Belaur, pero no pudo sofocar definitivamente su insurrección hasta 1336 o 1337.
[52] Los turcos desembarcaron en el delta del Danubio, atacaron las ciudades que encontraron y saquearon los campos.
[55] Entre 1341 y 1347, el Imperio bizantino se sumió en una cruenta guerra civil entre la regencia del joven emperador Juan V Paleólogo, encabezada por su madre Ana de Saboya, y el supuesto protector del niño, Juan Cantacuceno.
[56] Sin embargo, pese a militar en bandos opuestos durante el conflicto bizantino, ambos reinos mantuvieron su alianza.
[59] Estas acciones, que indignaron a los bizantinos, parecen haber sido apoyadas por los búlgaros, ya que el patriarca de Bulgaria, Simeón, participó en la creación del Patriarcado serbio y la coronación de Dušan.
[63] La guerra civil bizantina terminó en 1351 y Juan Cantacuceno percibió finalmente la amenaza que los turcos representaban para los Balcanes.
[67] La hija del zar, Keratsa, se casó con el futuro emperador Andrónico IV Paleólogo para consolidar el nuevo tratado, que no produjo resultados concretos.
[4] Dos años después, cuando Juan V regresaba de su viaje a Occidente, los búlgaros le negaron el permiso para cruzar su territorio.
[75][4] En mala posición para continuar los combates, Iván Alejandro se vio obligado a pedir la paz.
[79][80][81][82] Recobró en efecto la ciudad, e Iván Esratsimir recuperó su trono en 1369, aunque el rey húngaro lo obligó a reconocer su autoridad.
[83] El relativo éxito en la solución de la crisis del noroeste no compensó las pérdidas en el sureste.
[90] Especialmente Mesembria, donde se construyeron muchas nuevas iglesias y edificios públicos, así como instalaciones portuarias durante el reinado.
[108] El camino hacia esto pasaba por el arrepentimiento, limpiándose uno mismo de las pasiones mundanas y la contemplación.
[115] Con su segunda esposa Sara Teodora, tuvo seis hijos que se conozcan: Keratsa, que se casó con el emperador bizantino Andrónico IV Paleólogo; Iván Shishman, que sucedió a su padre como zar de Bulgaria en Tarnovo entre 1371 y 1395; Iván Asen V, asociado al poder entre 1359 y 1388; una hija llamada Tamara, que contrajo matrimonio primero con el déspota Constantino y luego con el sultán Murad I del Imperio otomano; así como dos hijas llamadas Desislava y Vasilisa.