Debido a que era menor de edad en ese momento, su padre, Vladislav, gobernó por breve tiempo como regente, seguido por su madre, Jelena.
Le sobrevivió al menos un hijo, Tvrtko II, pero fue sucedido por Dabiša, bajo el cual su floreciente reino comenzó a declinar.
[1] Posiblemente recibió una educación católica; su madre profesaba esta religión, y su tío también se adhirió a ella poco después de su nacimiento.
[5] Sin embargo, este solo tenía unos quince años en ese momento,[4] por lo que su padre gobernó como regente.
Esto lo ponía en peligro, ya que, aunque fue católico durante toda su vida, el rey húngaro ahora tenía un pretexto religioso para invadir su territorio.
[9] Este último incluso intentó conspirar en su contra, pero fracasó cuando un lector descubrió sus cartas en Đakovo, la residencia de Pedro.
[10] La Iglesia bosnia, mientras tanto, sobrevivió durante todo su reinado, pero solamente se hizo prominente en los asuntos estatales después de su muerte.
Una fuente hostil incluso intentó vincularlo con ella debido a su tolerancia hacia todas las religiones locales, incluido el cristianismo ortodoxo en Hum.
Varias cartas emitidas por sus predecesores, y confirmadas luego por Tvrtko, prometían la misma protección a los comerciantes raguseos.
[8][17] Los funcionarios raguseos hicieron un esfuerzo para procurar la paz entre los hermanos enemistados,[17] y en 1368, Vuk solicitó al papa Urbano V que interviniera a su favor ante el rey Luis.
[17] La muerte del zar Esteban Dušan y el ascenso de su hijo Uroš V, en diciembre de 1355, fue seguido rápidamente por la ruptura del amenazante Imperio serbio; este se desintegró en señoríos autónomos que, por sí mismos, no podían resistir a Bosnia.
Esto permitiría a Tvrtko expandir sus dominios hacia el este, pero los problemas internos le impidieron aprovechar esa oportunidad de inmediato.
El ban y Lazar Hrebljanović, señor de la Serbia del Morava, ambos respaldados por Hungría, actuaron para proteger esas ciudades.
[22][23] Esta fue la primera expansión significativa de Tvrtko durante su reinado y le dio una influencia sustancial sobre los asuntos serbios.
[25] El matrimonio probablemente fue arreglado por Luis,[11] que había mantenido a Dorotea y su hermana como rehenes en su corte para asegurar la lealtad de su padre.
Habiendo sido obligado a aceptar la soberanía otomana, no fue reconocido como rey por ninguno de los magnates serbios, lo que dejaba efectivamente el trono vacante.
Una genealogía publicada en las tierras serbias que recién había conquistado, enfatizaba su parentesco con aquella dinastía, derivada de su abuela paterna, Isabel, hija del rey Dragutin.
Argumentando que Serbia se había «quedado sin su pastor», el ban propuso ser coronado como su rey.
[38] Tal opinión, todavía perpetuada solo en la historiografía serbia,[39][40] contradice investigaciones recientes basadas en metodología moderna en otros lugares.
[44] Además del título real, también adoptó el nombre simbólico de Esteban para asociarse con los reyes Nemanjić; sus sucesores hicieron lo mismo.
[49] Al haber ocupado tanta tierra serbia como pudo, el rey Tvrtko dirigió su atención a la costa.
Inicialmente llamada así por san Esteban, la ciudad llegó a ser conocida como Novi, que significa «nuevo».
Aunque el ejército bosnio arrasó las áreas de Split y Zadar, las ciudades se negaron a capitular.
Sus funcionarios estaban dispuestos a honrarlo, pero insistieron en que la reina María y el rey Segismundo eran sus soberanos legítimos.
[67] Para 1388, la devastación de Dalmacia por parte del ejército bosnio se había vuelto tan severa que las autoridades de las ciudades le suplicaron a Hungría que les ayudara o les permitiera salvarse al someterse sin ser etiquetados como traidores.
[63] Đurađ II, sin embargo, permitió deliberadamente a los turcos lanzar ataques contra Bosnia, primero en 1386 (de los cuales se sabe poco) y nuevamente en 1388.
Aunque ambas monarquías no se reconocían, Tvrtko y Segismundo comenzaron a negociar la paz en septiembre.
[80] Dabiša, un pariente (posiblemente medio hermano ilegítimo) exiliado por su participación en la rebelión de 1366 y reconciliado con este en 1390, fue escogido en su lugar.
Sus logros políticos fueron apoyados por la anarquía feudal en Serbia y Croacia, mientras que los otomanos todavía no estaban lo suficientemente cerca como para amenazarlo seriamente.
[81] Haciendo hincapié en su paciencia y diplomacia, Ćorović lo llama un hombre capaz de aprovechar al máximo sus oportunidades.