Inmigración alemana en Brasil

UU.; 32,2% en las siguientes dos décadas; y al final del siglo XIX eran el grupo de inmigrantes más numeroso (21,9%) en los Estados Unidos.

Cuando comenzó el asentamiento de otros europeos en Brasil, los alemanes ya habían vivido allí por muchas generaciones.

Hubo gobiernos europeos que llegaron a incentivar la emigración como método de control poblacional.

Se llegó incluso a contratar administradores y profesionales liberales para la formación de estas "colonias".

Aunque deseadas, las relaciones comerciales entre las colonias alemanas en Brasil y su tierra de origen fueron muy modestas, a veces sin contacto posterior alguno.

Los alemanes que emigraron para Brasil eran en su mayoría campesinos insatisfechos con la pérdida de sus propiedades, ex artesanos, trabajadores libres y emprendedores buscando ejercer libremente sus actividades, personas "contratadas" a través de incentivos para administrar colonias o contratados por el gobierno brasileño para trabajos intelectuales o participación en la defensa del país.

En principio, el gobierno brasileño reconoció, desde la independencia, que la inmigración extranjera sería indispensable para el crecimiento del país.

Los inmigrantes alemanes se reunían en grupos y formaban colonias donde podían ejercer sus profesiones, sin restricciones en cuanto al uso de la lengua, religión o tradiciones.

Algunas colonias sobrevivieron, incluso regresando a formas precarias de vida hacía mucho superadas en Alemania.

Los primeros inmigrantes alemanes en establecerse en Brasil fueron 165 familias que se asentaron en Ilhéus, Bahía, en el año 1818.

Alemania estaba sufriendo los efectos de las guerras contra Napoleón, la superpoblación y la pobreza en el campo.

Para atraer a los inmigrantes, el gobierno brasileño había prometido grandes extensiones de tierra donde pudieran establecerse con sus familias y colonizar la región.

[8]​ Los inmigrantes alemanes en Brasil se establecieron principalmente en las zonas rurales, llamadas colonias (colônias en portugués).

Los alemanes ayudaron a establecer una población de clase media en Brasil, un país que estaba dividido antes entre los esclavos y sus amos.

La mayoría de ellas habían sido colonizadas por inmigrantes alemanes, italianos y polacos en el siglo XIX.

En estas áreas remotas pastorales y agrícolas, los inmigrantes no estaban bajo el control de los poderosos terratenientes brasileños.

En un primer momento, se encontraron con bosques vírgenes que podrían ser ocupados o comprados a bajo precio.

Sin embargo, la convivencia con los brasileños locales (amerindios, luso-brasileños provenientes de las Azores, gauchos mestizos y algunos afro-brasileños) mostró que las diferencias con los lugareños eran también geniales.

Con la migración hacia los centros urbanos, las generaciones más jóvenes ampliaron su horizonte cultural y su propia visión de Brasil.

Estas aldeas rurales están conectadas a las principales ciudades donde se ha diversificado la economía, la adición de las industrias artesanales para la producción agrícola original.

En los últimos años un gran desarrollo industrial se ha producido en estas áreas, derivadas de la industria casera.

Algunas de las comunidades alemanas viejas son ahora prósperos centros industriales, como São Leopoldo, Novo Hamburgo, Blumenau, Joinville e Itajaí.

[21]​ El gobierno alemán prohibió en 1859 la emigración hacia Brasil debido a un fuerte movimiento nacionalista surgido en Alemania.

Los problemas comenzaron ya con la llegada a Brasil, en los navíos, en viajes que podían durar hasta 4 meses atravesando el Atlántico.

Muchos viajes fueron realizados en navíos sobrecargados, con escasa alimentación y poca o ninguna higiene.

Gerhard Brunn tiene en su libro sobre las relaciones entre Alemania y el Brasil un capítulo sobre la emigración antes de la Primera Guerra Mundial.

El geógrafo Bonn Leo Waibel publicó un libro sobre la colonización europea del Brasil Meridional.

[30]​ En los últimos años ha surgido un gran interés por el aprendizaje de la lengua alemana en todo Brasil, principalmente en São Paulo y en el Nordeste.

Las ciudades de Pomerode, Antônio Carlos, posee un sitio oficial tanto en portugués como en alemán.

Al igual que con otros brasileños, hay una minoría significativa de personas no religiosas, y el pentecostalismo está en aumento.

Mapa de los primeros asentamientos alemanes en los estados del sur de Brasil, 1824.
Arquitectura enxaimel , típicamente alemana en Blumenau , Santa Catarina .
Nova Petrópolis ( Río Grande del Sur ), colonia alemana fundada en el año 1858.
Gramado es una ciudad turística ítalo-germana en Río Grande del Sur .
Muchas ciudades en el área metropolitana de Porto Alegre fueron fundadas por alemanes, tales como São Leopoldo , Novo Hamburgo , Nova Hartz , Dois Irmãos ( Baumschneis ), Ivoti ( Berghanschneis ) y Sapiranga ( Leoner-Hof ).
Jacobina Mentz Maurer, la líder de los Muckers .
Karl Graf von Luxburg Schoenaich-Carolath (Karl Ludwig Graf von Luxburg Furst zu Carolath-Beuthen und Prinz von Schoenaich-Carolath / Karl Ludwig Conde de Luxburg Príncipe de Carolath-Beuthen y Príncipe de Schoenaich-Carolath uno de los alemanes de la descendecia real que aportó a la causa de la inmigración alemana en América latina en los años 1939-1956.
En la Encuesta Municipal de 2002 se reveló que el 45% de la gente de Jaraguá do Sul es descendiente de alemanes. Los otros grupos principales son los italianos (25%), polacos (6%), y húngaros (3%); el 21% pertenece a otros grupos. [ 23 ]
El Barrio Brooklin de São Paulo fue fundado y poblado por alemanes. Fue nombrado así por el barrio neoyorquino en 1906 por una compañía canadiense . [ 24 ]
El Museo Comunitario Casa Schmitt-Presser en Novo Hamburgo , construido a principios del siglo XIX por el inmigrante alemán Johann Peter Schmitt.
Una Iglesia Luterana en Schroeder, Santa Catarina.