Historia de la escritura

Los primeros sistemas de la escritura a finales del IV milenio a. C. no se consideran una invención espontánea, pues se fundamentan en viejas tradiciones de sistemas simbólicos que no se pueden clasificar como escritura en sí mismas, pero que sí comparten muchas características que recuerdan a aquella.

Estos sistemas aparecieron al principio del periodo neolítico, ya en el VII milenio a. C. si no antes (Kamyana Mohyla), en pleno Paleolítico Superior.

Según algunos arqueólogos, la escritura de los caparazones presentaba similitudes con la escritura sobre huesos oraculares del II milenio a. C.[2]​ Otros,[3]​ sin embargo, rechazan esta afirmación por no estar suficientemente probada, argumentando que unos simples diseños geométricos, como los que aparecen en los caparazones de Jiahu, no se pueden relacionar con la primera escritura.

La arqueóloga Denise Schmandt-Besserat determinó la conexión entre las «fichas» de arcilla sin categorizar previamente y la primera escritura conocida, el protocuneiforme.[4]​[5]​.

Las primeras formas de escritura eran logográficas en naturaleza, basadas en elementos pictográficos e ideográficos.

Este hallazgo cuestiona la creencia extendida de que los primeros pueblos en escribir fueron los sumerios de Mesopotamia (actual Irak) en algún momento anterior al 3000 a. C.[8]​ También surgió en esta época una escritura protoelamita logográfica aún por descifrar, que evolucionó a un elamita lineal hacia finales del III milenio, que a su vez fue reemplazado por la escritura cuneiforme tomada del acadio.

La escritura china, que data aproximadamente del siglo XII a. C. (finales de la dinastía shang), era gráficamente independiente de las escrituras del Oriente Medio, aunque, como en el caso del egipcio, puede que el difusionismo transcultural haya tenido algún papel relevante, aunque no existe una evidencia de eso y tiende a pensarse que esta escritura tuvo un origen independiente de las desarrolladas en Oriente Medio y las regiones colindantes.

También las escrituras egipcia y china desarrollaron complementos fonéticos para facilitar la lectura de los signos logográficos.

A finales del IV milenio a. C. ya había evolucionado hacia un método de contabilidad en el que se utilizaba un estilete redondeado que se imprimía sobre arcilla flexible con ángulos variables para grabar números.

Otras escrituras similares en apariencia a este sistema son el ugarítico y el antiguo persa.

Las tablillas estaban escritas en columnas (variantes en número), que indicaban: La escritura fue muy importante para mantener la cohesión del Estado egipcio.

Los primeros alfabetos puros (más propiamente "abyads", que emparejan un único símbolo a cada fonema, pero no necesariamente un solo fonema a un único símbolo) surgieron hacia el 1800 a. C. en el antiguo Egipto como una representación del idioma desarrollado por los obreros semíticos de Egipto, pero ya por entonces había una ligera probabilidad de que los principios del alfabeto se incorporaran a los jeroglíficos egipcios.

Estos primeros abyads tuvieron poca importancia durante varios siglos y solamente a finales de la Edad del Bronce la escritura protosinaítica se divide en el alfabeto protocananeo (hacia el 1400 a. C.), el silabario de Byblos y el alfabeto ugarítico (hacia el 1300 a. C.).

La invención del alfabeto no fue un episodio repentino, sino el resultado de todo un largo proceso.

Aunque frecuentemente se ha dicho que estas escrituras tenían un carácter pictográfico o nemotécnico, desciframientos realizados en la segunda mitad del siglo XX han probado que varias de las escrituras precolombinas eran sistemas fonológicos completos para representar un idioma arbitrariamente a partir de su pronunciación.

Por ejemplo el jefe cheroqui Sequoyah desarrolló un silabario propio: Como puede verse algunos de los signos tienen formas que recuerdan al alfabeto latino, pero Sequoyah sólo usó esas formas, atribuyéndoles sonidos independientes de los que tenían en alfabeto latino.

En África se desarrolló una gran cantidad de silabarios y alfabetos a partir del contacto con los europeos.

Entre ellos está el silabario vai, los alfabetos adinkra, osmanya, borama, kaddare o la escritura luo.

Por ejemplo, el adinkra es un conjunto de símbolos desarrollados por los akan, utilizado para representar conceptos y aforismos.

La tradición oral atribuye el origen del adinkra a Gyaman en los actuales Ghana y Costa de Marfil.

Marcas similares a la escritura dibujadas sobre caparazones de tortuga , descubiertos en la moderna Jiahu ( China ), datados hacia el 6000 a. C..
Signario de la Escritura Lineal Paleolítica (ELPA), compilado tras veinte años de catalogación de los registros de arte rupestre y grafismos usados durante el Paleolítico superior . [ cita requerida ]
Tableta legal de Alalah en su envoltorio en babilonio medio.
Láminas de Pirgi estratificado de oro que representa un tratado en los idiomas etruscos y fenicios en el Museo Nacional Etrusco , siglo IX a. C. El comienzo de la escritura con alfabeto latino .
El Código de Hammurabi , creado alrededor del 1750 a.C., es uno de los primeros conjuntos de leyes escritas. Contiene 282 leyes que regulan aspectos como el comercio, el matrimonio y el castigo de delitos. Basado en la ley del Talión ("ojo por ojo"), también introduce la presunción de inocencia, un principio fundamental del derecho moderno.
Secuencia de diez signos indos descubiertos cerca de la puerta norte del sitio arqueológico indo Dholavira .
Glifos mayas en estuco. Museo de Sitio de la zona arqueológica de Palenque (México).
Símbolos rongo rongo sobre soporte de madera.
Los 45 caracteres del alfabeto Adinkra