Cultura lambayeque

La cultura lambayeque o sicán es una cultura arqueológica del Antiguo Perú que se manifestó entre los siglos VIII y XIV d. C. en el territorio costeño que corresponde al departamento de Lambayeque, llegando a su apogeo entre los siglos X y XI.

En su desarrollo se distinguen tres fases o etapas: Destacaron en arquitectura, e incluso llegaron a ser grandes navegantes.

Al mismo tiempo, utilizaron materiales que aún representan a Perú como la lana y el algodón.

La nobleza le enterró en su palacio, pero deseosos de hacer creer en su inmortalidad, anunciaron que, hastiado de la vida terrena, había empleado su poder para hacerse crecer alas y se había remontado en vuelo al cielo.

El pecado del rey ocasionó una serie de desgracias para la nación lambayeque: lluvias, sequías, hambruna.

Esta aseveración la han aceptado otros investigadores (P.Kosok 1965 y J.Rondón 1966) desde la década de 1920 hasta ahora.

Que la palabra original en el idioma muchik sería XLLANG, que pronunciado sería “SIAN” según el diccionario matriz de Don Fernando de la Carrera y Daza (1644) titulado “Arte de la lengua yunga”; la palabra “Xllang” significa SOL y la encontramos por ejemplo en el antiguo nombre del río “Lambayeque”: FAXLLANG (A); la pronunciación “Sian” fue escrita con la “C” y la “P” al centro, no siendo una palabra compuesta como sugiere Brüning.

El arqueólogo japonés Izumi Shimada, que estudió esta cultura durante varios años, ha dividido la historia de Lambayeque (o "Sicán" como prefiere denominarla) en tres etapas: Es una etapa poco conocida, porque los objetos arqueológicos (cerámica, textiles, arquitectura) son escasos.

Estas evidencias indican que Lambayeque estaba todavía en plena formación y muy susceptible a las influencias externas.

Fue una era de transformaciones en que valores, creencias, tecnologías e instituciones existentes (locales), así como las introducidas fueron revisadas y adoptadas, modificadas o rechazadas selectivamente.

El resultado puede denominarse como una «verdadera cultura andina», ya que forjó una nueva identidad mediante una fusión selectiva de elementos de las tradiciones andinas más prominentes del norte y del sur.

Algunos elementos representaron un lógico refinamiento de desarrollos anteriores, en tanto que otros constituyeron innovaciones culturales; es decir, vemos la amalgamación innovada de antiguas y nuevas ideas, instituciones, materiales y tecnologías en una renovada configuración que denominamos Sicán Medio.

En contraste, los motivos abstractos, altamente convencionales, persistieron en la cerámica paleteada del Sicán Tardío.

Fue gobernada por el rey-sacerdote (teocracia), que vivía en un palacio rodeado de una fastuosa corte.

Cuando moría se le enterraba en una tumba con ricas ofrendas, como se puede apreciar en la del llamado Señor de Sicán, descubierta en la Huaca del Oro (perteneciente a la zona arqueológica de Batán Grande) en 1991.

El resultado fue una agricultura próspera, con cultivos de pallares, frijoles, camote, calabaza, zapallo loche, maíz y algodón.

Ello convirtió a la costa norte peruana en la zona más rica y productiva del Antiguo Perú.

Articular tantos valles y estar en una zona estratégica (fácil de vincularse con las distintas regiones), les permitió destacar también en el comercio.

Las principales pirámides o huacas se hallan en Batán Grande, Túcume y Apurlec.

Lamentablemente, muchas de estas pinturas están deterioradas por los estragos del clima y la acción destructora humana.

No obstante, en la huaca Chornancap, en Lambayeque, encontramos paredes que reflejan temas relacionados con la agricultura y las cabezas trofeo.

Igualmente en Túcume, en su sector noreste, se desenterraron relieves planos con pintura que representan aves estilizadas.

En la Huaca Chotuna también se pueden ver decoración en relieve que representan a aves marinas volando o en picada.

El mineral era molido con pesados martillos de piedra y colocado en hornos para su fundición.

Los hornos eran pequeños agujeros hechos en el suelo, que vistos desde arriba tienen forma de pera.

Y eso porque las técnicas anteriores fueron dominadas ampliamente, además de crearse otras nuevas para obtener brillos excepcionales e inventarse utensilios para moldear formas caprichosas.

A diferencia de la moche, se caracteriza por utilizar colores sobrios u oscuros, como el negro y gris, con un acabado similar al metal; aunque también hay colores "apastelados", como crema y naranja.

Adorno discoidal dorado, laminado y calado decorado con lentejuelas.
Tumi: representación de Naylamp .
Huaca del Oro vista desde el cerro Las Salinas.
Huacas de Túcume.
Vasos de oro del periodo Sicán medio, hallados en Lambayeque.
Máscara funeraria proveniente de Batán Grande.
Cántaro representando una entidad divina ( Museo Nacional Sicán ).