[5][6][7] Reconocido por su erudición, fue invitado a disertar sobre álgebra en la Universidad de París cuando aún no superaba la veintena.
Dee promovió las matemáticas y se interesó por la astronomía y la navegación, habiendo adiestrado a muchos de aquellos que llevarían a cabo viajes de descubrimiento para Inglaterra.
En uno de los numerosos tratados que Dee escribió en los años 1580 alentando las expediciones británicas en busca del Paso del Noroeste, parece haber acuñado (o al menos introducido en imprenta) el término "Imperio británico".
[8] Simultáneamente, Dee se sumergió en los mundos de la magia, la astrología y la filosofía hermética.
En 1552, conoció a Gerolamo Cardano en Londres: durante su amistad investigaron una máquina de movimiento perpetuo así como una joya que pretendía tener propiedades mágicas.
Limpiando su nombre una vez más, pronto se convertiría en un estrecho colaborador de Bonner.
[19] En 1577, Dee publicó General and Rare Memorials pertayning to the Perfect Art of Navigation, una obra en la que proponía su visión de un imperio marítimo y hacía valer las demandas territoriales inglesas en el Nuevo Mundo.
El evento tuvo lugar en el castillo real en Niepołomice (cerca de Cracovia, entonces la capital de Polonia) y siendo más tarde ampliamente analizado por historiadores polacos (Ryszard Zieliński, Roman Żelewski, Roman Bugaj) y escritores (Waldemar Łysiak).
Mientras mayoritariamente lo aceptaron como un hombre de amplio y profundo conocimiento señalaron también sus conexiones con la monarca inglesa Isabel.
Esto los incitó a concluir que la reunión podría haber ocultado objetivos políticos.
Kelly, quien por entonces se estaba convirtiendo en un prominente alquimista y era mucho más codiciado que Dee, pudo haber querido utilizar esto como una forma de terminar con las conferencias espirituales.
[40] La orden causó en Dee gran angustia, pero no dudó de su autenticidad y aparentemente permitió seguir adelante, pero interrumpió las conferencias inmediatamente después y no vio a Kelly de nuevo.
[15][40] Buscó el apoyo de Isabel, que finalmente lo hizo director del Christ's College, Mánchester, en 1595.
[43] Sin embargo, no podría ejercer mucho control sobre los becarios, que lo despreciaron o engañaron.
[12] Dejó Mánchester en 1605 para regresar a Londres,[44] sin embargo siguió siendo director hasta su muerte.
[45] Para entonces, Isabel había muerto, y Jacobo I, indiferente a todo lo relacionado con lo sobrenatural, no proveyó ayuda alguna.
[12] Su hijo mayor fue Arthur Dee, de quien Dee escribió una carta a su director en la Westminster School, que se hace eco de las preocupaciones parentales referentes al internado en cada siglo; Arthur fue también un alquimista y autor hermético.
[12] El anticuario John Aubrey[48] da la siguiente descripción de Dee: "Era alto y delgado.
Llevaba un vestido como el traje de un artista, con mangas colgando, y una comisura... Una bella, lúcida complexión sanguínea... una larga barba tan blanca como la leche.
[16] Partiendo del hermetismo, extrajo la creencia de que el hombre tenía el potencial del poder divino, y pensaba que dicho poder podría ser ejercitado a través de las matemáticas.
Su magia angélica cabalística (que era fuertemente numerológica) y su trabajo en matemáticas prácticas (para navegación, por ejemplo) eran para él los extremos elevado y mundano del mismo espectro, no las actividades contrapuestas que muchos podrían considerar hoy en día.
El hijo de Cotton entregó estos manuscritos al estudioso Méric Casaubon, quien los publicó en 1659, junto con una larga introducción crítica de su autor, A True & Faithful Relation of What passed for many Yeers between Dr. John Dee (A Mathematician of Great Fame in Q. Eliz.
[49] Hacia la misma época en la que fue publicada la True and Faithful Relation, miembros del movimiento rosacruz reclamaron a Dee como uno de sus afiliados.
Esa información falsa y a menudo fantástica sobre Dee oscurece los hechos de su vida, notables en sí mismos.
Estudió en estrecha colaboración con Gerardus Mercator, y poseyó una importante colección de mapas, globos e instrumentos astronómicos.
Desarrolló nuevos instrumentos así como técnicas especiales de navegación para su uso en las regiones polares.
[12] Muchos de sus cálculos astronómicos se basaron en hipótesis copernicanas, pero nunca adoptó abiertamente la teoría heliocéntrica.
Dee fue conocido, sin embargo, por haber poseído una copia del Libro de Soyga, otra obra cifrada.
[55] A petición de Isabel I Dee abrazó el viejo mito galés del 'Príncipe Madog' para reclamar Norteamérica.