Como objetivo secundario, se fijó el control total de la costa adriática, para evitar un posible desembarco aliado en los Balcanes.
[9] La batalla se caracterizó por las extremas condiciones a que fueron sometidos los soldados, en un terreno muy irregular.
Especialmente difícil fue la situación del Movimiento Partisano, asediado en duras condiciones de hambre, esfuerzo físico y enfermedades.
Por su parte, los 2000 búlgaros actuaron repartidos entre unidades alemanas y su 63.º Regimiento de Infantería, destinado a Mokra Gora (Serbia ocupada) como apoyo.
Si bien algunos autores afirman que, atacados por los partisanos tras la Operación Weiss debieron replegarse hacia Bosnia sufriendo numerosas bajas,[17] otros apuntan que Mihajlović en persona negoció con los alemanes su no intervención en la operación.
[20] Principalmente, la batalla consistió en movimientos de tropas alemanas para eliminar a contingentes partisanos que se encontraban en áreas determinadas.
[23] Pese el empuje de la 118.ª División Jäger, reforzada con batallones del Regimiento Brandeburgo, la Brigada Dálmata resistió el asedio con cuantiosas pérdidas, llegando a perder 2/3 de sus integrantes.
Algunos informes de la posguerra señalaron que su perro, el pastor alemán Luks, sacrificó su vida para salvar a Tito.[25][26][n.
Según narró el capitán William Deakin,[31] la huida se desarrolló «por escarpadas laderas, y cruzando un río de aguas rápidas, con los alemanes atacando con la aviación para intentar volar los pocos puentes que quedaban en pie».
[32] La columna, dirigida por la 1.ª Brigada Proletaria,[23] fue perseguida por la 7.ª División de Montaña SS Prinz Eugen, la 118.ª División Jäger y la 1.ª División Alpina Taurinense italiana,[23] y aún tuvieron que enfrentarse al 369.º Regimiento de Infantería Reforzada croata que bloqueaba su escape hacia el norte,[2] atravesando sus líneas al mando del general Koča Popović y poniéndose a salvo entre los días 14 y 15 de junio, llegando en dos grupos separados.
[29] Entre los fallecidos, los nombres más prominentes fueron Sava Kovačević, Veselin Masleša, Sima Milošević, Vasilije Đurović, Ivan Goran Kovačić, Olga Popović-Dedijer y Momčilo Stanojlović.
[4] Un informe alemán señaló que se había producido una epidemia de tifus y que debieron enterrar en fosas comunes a los muertos del hospital y quemar algunas aldeas debido a la infección.
Sutjeska), dirigida por Stipe Delić y protagonizada por Richard Burton interpretando a Tito, estrenada en el 30.º aniversario de la batalla.
El complejo contiene frescos monumentales del artista croata Krsto Hegedušić.
[48] Otros memoriales instalados en los lugares donde se desarrolló la batalla son el monumento de Sava Kovačević en las cercanías de Tjentište y el monumento a la 2.ª Brigada Dálmata cerca del lago Donje Bare.
[49] La poesía épica yugoslava también se hizo eco de la batalla del Sutjeska y su repercusión, destacando el poema Sutjeska, del escritor montenegrino Mirko Banjević, que también dedicó una obra a Sava Kovačević.