Paz

de pāx), definida en sentido positivo, es un estado a nivel social o personal, en el cual se encuentran en equilibrio y estabilidad todas las partes de una unidad.

En el derecho internacional, el estado de paz es aquel en el que los conflictos internacionales se resuelven de forma no violenta; y particularmente se denomina «paz» al convenio o tratado (tratado de paz) que pone fin a la guerra.

Puede hablarse de una paz social como consenso: el entendimiento tácito para el mantenimiento de unas buenas relaciones, mutuamente beneficiosas, entre los individuos; y a distintos niveles, el consenso entre distintos grupos, clases o estamentos sociales dentro de una sociedad.

La antropología tradicional (ya desfasada) consideraba que únicamente el estado civilizado de la evolución cultural consideraba a la paz de una forma positiva, y que los estados de salvajismo y barbarie suponían una preferencia cultural por la guerra, considerando una forma honrosa de vida saquear a otros pueblos, y exaltando las virtudes guerreras; en casos extremos, ritualizando la antropofagia.

El Antiguo Testamento cuando usa la expresión shalom («paz» en hebreo), especialmente en los saludos, se refiere a un bienestar material y de espíritu: «La paz esté contigo» o «con vosotros» (cf.

Gn 29, 6) y en este sentido no se opone a la guerra.

[3]​ Tal paz solo puede venir de Dios mismo que quiere darla en compensación por la fidelidad de su pueblo a la Alianza aun cuando la paz en su sentido más pleno se espera para los tiempos del Mesías que es llamado Príncipe de la paz (cf.

Según se enumeran en The New International Dictionary of New Testament Theology («El nuevo diccionario internacional de la teología del Nuevo Testamento»), algunos son: «Por todo el Antiguo Testamento, [shalom] (paz) abarca bienestar en el sentido más amplio de la palabra (Jue.

Por su parte Jesús da un sentido místico a la paz en el Nuevo Testamento, afirmando que Él mismo es poseedor de ella y puede darla a sus discípulos (Jn 14:27).

Esta paz es de una naturaleza diferente a la ofrecida por el mundo (bienes materiales, prosperidad, salud, etc) y solo podría ser obtenida por medio de la fe y la obediencia en Él.

Si bien las connotaciones modernas son recientes, habiendo sido explicadas desde el siglo XIX, abundan las referencias antiguas.

Su eficacia sirvió de inspiración para Martin Luther King Jr., James Lawson, Mary y Charles Beard, James Bevel,[8]​ Thich Nhat Hanh[9]​ y muchos otros en el movimiento por los derechos civiles.

[10]​ La no violencia tiene elementos "activos" o "activistas", en el sentido de que los creyentes generalmente aceptan la necesidad de la noviolencia como un medio para lograr el cambio político y social .

Así, por ejemplo, la no violencia tolstoyana y gandhista es tanto una filosofía como una estrategia de cambio social que rechaza el uso de la violencia, pero al mismo tiempo ve la acción noviolenta (también llamada resistencia civil) como una alternativa a la aceptación pasiva de la opresión o lucha armada contra ella.

La posición "realista" clásica es que la clave para promover el orden entre los estados y, por lo tanto, para aumentar las posibilidades de paz, es el mantenimiento de un equilibrio de poder entre los estados, una situación en la que ningún estado es tan dominante que pueda "establecer la ley al resto ".

Además, el filósofo Robert L. Holmes argumentó que se pueden utilizar cuatro principios de "personalismo moral" para promover una alternativa éticamente viable al principio de destrucción mutua asegurada.

Sostiene además que hacer la guerra en la era moderna es injustificable cuando se considera en su totalidad y que al trascender las percepciones particulares de jus ad bellum o el jus in bello, es posible ser un "pacifista pragmático" incluso en la era moderna.

Por ejemplo, el economista de Cambridge John Maynard Keynes (1883-1946) dijo que se le "educó" en esta idea y la mantuvo incuestionable hasta al menos la década de 1920.

[17]​ Durante la globalización económica en las décadas previas a la Primera Guerra Mundial, escritores como Norman Angell argumentaron que el aumento de la interdependencia económica entre las grandes potencias hacía que la guerra entre ellas fuera inútil y, por tanto, improbable.

[19]​ Estas ideas han visto al capitalismo como coherente con la paz, e incluso propicia para ella.

Una de las estrategias bien estudiadas que adquirió riqueza más rápidamente se basó en Genghis Khan, es decir, un agresor constante que hace la guerra continuamente para obtener recursos.

Esto llevó, en contraste, al desarrollo de lo que se conoce como la "estrategia del tipo agradable provocador", un pacificador hasta que es atacado, mejorado simplemente para ganar con el perdón ocasional incluso cuando es atacado.

[52] El Premio Nobel de la Paz (en noruego y en sueco, Nobels fredspris) es uno de los cinco Premios Nobel que fueron instituidos por el fabricante de armamentos, inventor e industrial sueco Alfred Nobel, junto con los premios en Física, Química, Fisiología o Medicina, Literatura.

La paloma con la rama de olivo es un símbolo de paz.
Alegoría de la Paz de Valeriano Salvatierra ( Prado , Madrid ).
Godoy presentando la paz a Carlos IV de España por José Aparicio , 1796, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando . La obra representa el final de la Guerra del Rosellón con el Tratado de Basilea , con una representación personificada de la paz..
Alegoría de la Paz y la felicidad del Estado . La Paz era la consecuencia lógica de la justicia y el buen gobierno, se ligaba con el concepto de florecer y fructificar una nación. Obra atribuida al taller de Rubens y conservada en la Biblioteca Museo Víctor Balaguer .