El Sello de Patrimonio Europeo (en inglés: European Heritage Label; en francés: Label du patrimoine européen) es una distinción concedida por la Unión Europea a «los monumentos, los sitios arqueológicos, subacuáticos, naturales, industriales o urbanos, los lugares de memoria, los paisajes culturales, el patrimonio contemporáneo o el patrimonio inmaterial, asociados a un lugar, que hayan desempeñado un papel fundamental en la historia de Europa, de la integración europea o de la Unión.»[1] Los sitios distinguidos se conocen a veces como «sitios EHL», usando el acrónimo en inglés.Su valor añadido debe basarse en la contribución de los sitios seleccionados a la historia y la cultura europeas, incluida la construcción de la Unión, en una dimensión educativa clara que llegue a los ciudadanos, en especial los jóvenes, y en el establecimiento de redes entre los sitios para compartir experiencias y buenas prácticas.Todas esas localizaciones conservarán la denominación inicialmente, aunque antes de seis años un jurado someterá a revisión todos los lugares a los que se les haya concedido el título para garantizar el cumplimiento de los estándares y los criterios.Aparecen en primer lugar los sitios de honor, anteriores a la creación del propio Sello.A medida que se van revisando esos sitios, pueden ser distinguidos con el Sello (y pasan a la parte media, ordenada cronológicamente) o no serlo (se mantienen en la parte final de la tabla para una referencia histórica).