Concertaron las bodas su hermano, Alfonso, y Pedro de Noronha, arzobispo de Lisboa e hijo del conde Alfonso Enríquez.
[5] Este hecho provocó recelos en los grandes del reino, quienes formaron un partido en torno al infante Pedro, al que atribuian mejor derecho para ejercer la regencia.
Ingirió un té de hierbas y rápidamente se sintió mal.
En solo una hora, su cuerpo se cubrió de manchas y falleció.
[10] De su matrimonio con el rey Eduardo I nacieron nueve hijos:[11]