Condestable de Castilla

Condestable de Castilla fue un título creado por el rey Juan I de Castilla para sustituir al de alférez mayor del Reino.

En él recaía el mando supremo del ejército y tenía el derecho de llevar pendón, mazas y rey de armas.

Este tipo de transmisión se llevaría a cabo hasta 1473, cuando Enrique IV nombra condestable a Pedro Fernández de Velasco, a partir del cual el título se haría hereditario en la familia de los duques de Frías.

Posteriormente el castillo fue quemado por los franceses durante la guerra de sucesión española, en represalia a un acontecimiento histórico celebérrimo: el hecho de que el rey Francisco I de Francia estuviera cautivo en el mismo.

El condestable Pedro Fernández de Velasco ordenó la construcción de la casa del Cordón de Burgos y la llamada capilla del Condestable en la catedral de Burgos, donde está sepultado.

Detalle de la tumba del condestable Pedro Fernández de Velasco en la catedral de Burgos