[2] En 1880, conoció a al que sería su gran compañero de armas y amigo, el coronel Cipriano Castro.Junto a este, Juan Vicente Gómez se formó como militar en tres importantes campañas.[5] Sin embargo, se mantuvo impasible ante las sospechas de Castro respecto a su supuesta conspiración y esperó el momento preciso para lograr tomar el poder.[6] Inicialmente, Gómez emprende su mandato concediendo libertad a presos políticos y restableciendo la libertad de prensa; sin embargo, desestimó disolver el Congreso Nacional y convocar a una asamblea constituyente, petición que entonces gozaba de bastante popularidad.Sin embargo, Gómez logra suspender el proceso electoral previsto para ese momento alegando una supuesta invasión por parte de Cipriano Castro.[7] En 1914, Gómez logra el continuismo mediante una reforma de la Constitución, en la cual establece un presidencialismo en dos figuras: un Presidente Electo y Comandante en Jefe del Ejército, Juan Vicente Gómez; y un Presidente Provisional con funciones administrativas, Victorino Márquez Bustillos.Las inversiones extranjeras en el país que se habían iniciado en la época de Antonio Guzmán Blanco, y que tuvieron tropiezos durante el gobierno de Cipriano Castro, resultaron generosamente favorecidas por el régimen Gomecista.El pueblo venezolano llamaba a Juan Crisóstomo Gómez en vez de General, "Don Juancho" o simplemente "Juancho", este a pesar del cargo que ostenta sigue ejerciendo las funciones de Gobernador del Distrito Federal.El país se divide entre "Vicentistas" y "Juanchistas" hasta el extraño asesinato de Juan Crisóstomo Gómez.En París el general Román Delgado Chalbaud organiza con exiliados un movimiento revolucionario en el que se involucran en Venezuela los generales José Rafael Gabaldón, Emilio Fernández y Eleazar López Contreras, este último jefe de la guarnición de Caracas.El 28 de abril el general Gabaldón dando por descontado que los generales Fernández y López Contreras tomarían parte en el alzamiento, se levanta en armas en su hacienda “Santo Cristo” desde donde logra ocupar Boconó, Guanare, El Tocuyo y Biscucuy.No obstante, pese a sus esfuerzos, Gabaldón es progresivamente aislado por las fuerzas del general José Antonio Baldó, presidente del estado Portuguesa, por lo que decide entregarse siendo enviado al castillo Libertador de Puerto Cabello (1929-1935).[2] Los generales Norberto Borges, Ramón Dorta, Euclides José Barroeta, se alzan en mayo del mismo año, en la parte central del país; para apoyar al general Gabaldón, pero luego de algunas escaramuzas, fueron derrotados y reducidos a prisión en “La Rotunda”.[13] Los revolucionarios provenientes de Dánzig (actual Polonia) desembarcan en Puerto Sucre, donde inmediatamente entraban en combate en las calles de Cumaná, muriendo en la acción el propio general Delgado Chalbaud y el presidente del estado Sucre el general Emilio Fernández.[18] Gómez modernizó, profesionalizó e institucionalizó a las Fuerzas Armadas como la organización que es hoy en día.