Elecciones municipales de Perú de 1986
Los pepecistas adoptaron un discurso crítico contra el gobierno y trataron de vincular a la izquierda con Sendero Luminoso.La represalia senderista no se hizo esperar: en Ayacucho, realizaron diversas incursiones en poblados donde destruyeron locales y libretas electorales; en Lima, en vísperas de la jornada electoral, colocaron numerosos artefactos explosivos que no llegaron a estallar; en Trujillo, atentaron contra la candidata aprista a la alcaldía.La masiva victoria aprista les permitió controlar 151 de los 169 concejos provinciales, un logro basado en gran parte en el evidente apoyo gubernamental y la financiación estatal.El Partido Popular Cristiano no logró aumentar significativamente su popularidad, lo que se interpretó como un fracaso.La victoria histórica del aprismo es la más grande obtenida por un partido político peruano en unas elecciones subnacionales.