Edward Clark (director)

A través de su influencia en las principales organizaciones musicales, impulsó la nueva música y mediante sus amplios contactos con compositores británicos y europeos, tuvo un gran impacto al facilitar que la música clásica contemporánea estuviera disponible para el público británico durante más de 30 años.

Fue responsable de producir importantes estrenos mundiales y británicos (algunos de los cuales también dirigió), y estuvo asociado con la mayoría de los mejores compositores europeos y británicos, como Arnold Schönberg, Anton Webern, Alban Berg, Ferruccio Busoni, Igor Stravinsky, Béla Bartók, Paul Hindemith, William Walton, Arthur Bliss, Arnold Bax, Peter Warlock, John Ireland, Constant Lambert, Arthur Benjamin, Humphrey Searle, Denis ApIvor, Alan Rawsthorne, Benjamin Britten, Michael Tippett, Benjamin Frankel, Roberto Gerhard, Luigi Dallapiccola, Christian Darnton y otros.

[2]​[3]​ Cuando regresó a Newcastle, presentó un trabajo titulado 'Documento sobre un moderno compositor francés: Claude Debussy'.

[2]​ En 1909 estudió dirección con Oskar Fried en Berlín mientras trabajaba allí como corresponsal para The Musical Times.

[4]​ De 1910 a 1912, Clark estudió con Schönberg en Berlín, el único estudiante británico que tuvo.

[4]​ Al principio, Clark fue su único alumno, pero luego se le unieron Eduard Steuermann y otros.

Edgar Bainton, su colega de Newcastle, también fue internado en ese momento,[16]​ al igual que Ernest MacMillan, Arthur Benjamin y otros.

[2]​[25]​ En agosto de 1921 se casó con Dorothy ('Dolly') Stephen, y su hijo James Royston Clark nació en 1923.

Beecham fue la primera opción para director en jefe, pero se retiró, por lo que Adrian Boult llegó a dirigir la orquesta durante los siguientes 20 años.

Tertis también afirmó haber sugerido a Hindemith en su lugar, pero Walton confirmó que fue idea de Clark.

[32]​ Al principio, Walton se mostró algo reacio a invitar a Hindemith, ya que sintió que había modelado el concierto demasiado cercano al estilo de este último, y lo reconocería rápidamente; pero gracias a Clark, la invitación fue enviada y aceptada, el estreno tuvo lugar el 3 de octubre y los dos compositores se hicieron amigos de por vida (ya se habían conocido brevemente en 1923).

Fue la primera vez que Berg escuchaba esta música por radio y no la volvería a escucharla en directo hasta el 11 de diciembre en Viena, quince días antes de su muerte y, póstumamente, el Concierto para violín.

[38]​ Clark se acercó a varias personas en nombre de Schönberg, pero solo recibió negativas.

Sin embargo, sí pudo organizar dos conciertos en noviembre, en los que el Pierrot Lunaire y la Suite, Op.

[40]​ Pero la crítica más salvaje provino del propio Weill, quien la describió en privado como 'la peor actuación imaginable ... todo fue completamente incomprendido'.

[34]​[41]​[42]​ También en 1935 eligió a Harriet Cohen para interpretar nueva música soviética de Dimitri Shostakovich, Dmitry Kabalevsky, Leonid Polovinkin y Georgy Kh.

[47]​ Esto condujo que se utilizara la partitura de Britten para el documental Night Mail (1936).

Su torpeza administrativa y su falta de voluntad para comunicarse con sus colegas sobre lo que estaba haciendo, pensando o planeando.

[29]​ Adrian Boult apoyó a Clark hasta lo indecible, diciendo que había hecho un muy buen trabajo en circunstancias muy difíciles, pero fue demasiado tarde.

En el evento, la rama estadounidense se retiró del festival, pero Glanville-Hicks asistió a título personal.

Posteriormente, Dolly entró a trabajar para la BBC como secretaria[3]​ donde tuvo un romance con un colega de Clark, el ingeniero Peter Eckersley.

[66]​ Reith que era estrictamente puritano sobre estos asuntos (aunque su propia vida privada era cuestionable), no estuvo dispuesto a tener en la nómina a un miembro importante del personal que se sabía estaba llevando una relación adúltera o en proceso de divorciarse de su propia esposa.

[67]​ Sin embargo, Eckersley no fue despedido de inmediato, ya que se comprometió a poner fin al romance con Dolly Clark y regresar con su esposa.

No obstante, la infidelidad siguió su curso, hasta que Eckersley dimitió en abril de 1929.

[25]​ El caso Eckersley provocó una investigación pública sobre las prácticas del personal de la BBC.

Cuando se declaró la guerra en septiembre, no sintió la necesidad de regresar a su propio país, y decidió quedarse.

James estaba matriculado en una escuela alemana y obtuvo "una impresión muy favorable de la Alemania bajo el gobierno nazi".

[67]​[70]​ Fueron liberados por fuerzas británicas, pero pronto los volvieron a arrestar, siendo juzgados en Londres en octubre de 1945 por ayudar al enemigo mediante la radiodifusión.

[32]​ Clark dirigió The Pit en el Festival ISCM de 1946 en Londres, junto con sus Tres preludios sinfónicos.

En 1951, la Internationale Gesellschaft für Neue Musik (IGNM) otorgó a Edward Clark la medalla Arnold Schönberg.

Cartel para el concierto de Edward Clark, Moscú.