La denominación es más un convencionalismo popular, que un género cinematográfico puro acuñado por críticos, estudiosos o cineastas.
Los elementos más frecuentes de una película de acción son persecuciones (tanto a pie como con vehículos), tiroteos, enfrentamientos, artes marciales y luchas callejeras, armas, explosiones, agresiones y cualquier situación violenta o intensa.
Algunas películas que pertenecen al género de acción también están definidas dentro de otros géneros como el de ciencia ficción, terror, cine bélico, histórico oriental —China/Hong Kong y Japón, principalmente—, cine negro/mafias/narcos y policíaco.
La trama suele estar basada en un conjunto reducido de clichés en los que se suele incluir: Aunque desde los años 1990 los progresos tecnológicos —efectos visuales— han hecho sustituir en ciertos filmes a los actores de carne y hueso por animatrónicos y generados por ordenador o CGI, los actores reales destacados de este género aún son un elemento que dan realismo, deben o suelen poseer un físico formidable y entre los primeros 35 años del subgénero se denotarían algunos como Arnold Schwarzenegger, Kurt Russell, Steven Seagal, Sylvester Stallone, Bruce Willis, Wesley Snipes, Mark Dacascos, Tom Cruise, Vin Diesel, Dwayne Johnson, y Chuck Norris en el cine de los Estados Unidos; Dolph Lundgren, Jean Reno, Jean-Claude Van Damme, Bud Spencer y Jason Statham por parte el cine de Europa; y Bruce Lee, Jackie Chan, Chow Yun-Fat, Donnie Yen, Sammo Hung, Tony Jaa, Michelle Yeoh y Jet Li en el cine de Asia.
Los antepasados del género de acción están ya presentes en las primeras películas mudas a través de ciertos rasgos y elementos característicos, como las persecuciones o tiroteos.