Pierce Brosnan

Asimismo, incursionó en la televisión, interpretando personajes centrales tales como Remington Steele, en la serie estadounidense homónima, emitida por la ABC entre 1982 y 1987.

Con posterioridad volvió a ejercer del famoso espía Bond en El mañana nunca muere (1997), del director Roger Spottiswoode; El mundo nunca es suficiente (1999), de Michael Apted y Muere otro día (2002), película dirigida por Lee Tamahori.

En Married Life (2007) era Richard, el mejor amigo de Chris Cooper, y en Mamma Mia!

En la película The Ghost Writer (2010), dirigida por Roman Polanski y coprotagonizada por Ewan McGregor, interpreta a un ex primer ministro británico llamado Adam Lang.

Interpretó a un suicida en Mejor otro día (2014), película basada en la novela En picado, de Nick Hornby.

Here We Go Again, junto a Colin Firth, Amanda Seyfried, Meryl Streep y Cher.

De origen irlandés, Brosnan es el cuarto Bond (tras Connery, escocés; Lazenby, australiano y Dalton, galés) que no es inglés.

Al igual que Roger Moore, Brosnan debía su fama a otro programa del género, en su caso la serie de acción Remington Steele.

Un film que, tras su estreno, alguna gente llamaba "una celebración de Bond", pero otros, una gran mayoría, lo consideraba un desastre.

El director optó por un enfoque futurista hacia la película colocando efectos en cámara lenta que no sintonizan con la impronta de James Bond.

Esto hizo que un guion relativamente bueno escrito por Neal Purvis y Robert Wade, fuera destrozado en su segunda mitad.

Mostrar a Bond capturado por los norcoreanos, idea propuesta por Brosnan, fue muy efectivo, así como el combate de esgrima y las escenas en la clínica cubana.

En 2004 era difícil entenderlo, pero en 2006, se volvió el asunto más ameno con la interpretación de Daniel Craig.

Tal vez sí, pero no en ese Casino Royale que Neal Purvis, Robert Wade y Paul Haggis escribieron en diciembre de 2005.

Pierce Brosnan no podía de ninguna manera interpretar a un James Bond recién ingresado al MI6.

En Muere otro Día se exagera en los gadgets, como el Aston Martin Vanquish invisible, y la dirección es mediocre, pero su primera mitad -los guionistas reconocen que "-es un film de dos mitades"- es épica.

Pierce Brosnan en la premiere de Mamma Mia! (2008)
Pierce Brosnan en el Festival de Cannes.
Pierce Brosnan en el Toronto Film Festival en 2005.
Brosnan en el Festival de cine de Toronto de 2013.