Bombardeo de Guernica

La Legión Cóndor tenía como comandante al general Hugo Sperrle, siendo en esa fecha su jefe de Estado Mayor el teniente coronel Wolfram von Richthofen (primo del histórico aviador de la Primera Guerra Mundial Manfred von Richthofen, más conocido como el Barón Rojo), que ordenó, al parecer, el bombardeo y que en su diario personal admitía que en Guernica se había portado «muy maleducadamente».Estos aviones descargaron tanto bombas explosivas como incendiarias, «una mezcla del todo innecesaria si el objetivo hubiese sido un puente», causando una gran destrucción.El sacerdote Alberto Onaindía resumió así lo que había sucedido en esas tres horas y media de bombardeos:[10]​En una carta que dirigió al cardenal Isidro Gomá este mismo sacerdote le escribió lo siguiente:[11]​Los cazas, entretanto, disparaban en vuelo rasante a las personas que huían del lugar.[16]​ Se discute que Guernica fuera un objetivo militar vital en ese momento,[17]​ como alegaron los agresores, con el fin de cortar la retirada y el aprovisionamiento a las tropas del Frente Popular en la campaña de Vizcaya.[18]​ La repercusión internacional que alcanzó este bombardeo, unido a su utilización propagandística, ha hecho que sea una masacre mundialmente conocida y considerada como un icono antibélico, la masacre de Guernica.Nunca han llegado a saberse las cifras de víctimas ni existen datos fiables sobre el número exacto.El Gobierno vasco dio una cantidad oficial de víctimas de 1645 muertos y 889 heridos, que es el número citado en los folletos impresos en el extranjero y por la prensa internacional como algunos periódicos ingleses, aunque hoy se considera que este número está absolutamente hinchado.[22]​ Estos dos historiadores también señalan que no hubo más víctimas porque, después del primer bombardeo, la gente huyó al monte.[24]​ Por su parte los historiadores de la asociación "Gernikazarra" Vicente del Palacio y José Ángel Etxaniz estiman que hubo 126 fallecidos.[28]​ El jefe del estado mayor de la Legión Cóndor Von Richthofen escribió lo siguiente tras su visita a Guernica:[29]​La primera es la combinación de bombas explosivas e incendiarias utilizadas en el bombardeo, cuya «única explicación posible» es que se pretendía destruir la ciudad.Para más inri, el puente no fue alcanzado, y al terminar el bombardeo permanecía intacto».Algunos autores sostienen que el motivo del ataque consistía en una maniobra testaruda de Wolfram von Richthofen, pues opinaba que el ataque a Bilbao debía pasar por esta villa en vez de hacerlo por Durango.[cita requerida] El mando franquista quedó sorprendido, en un primer momento, ante la gravedad de la destrucción y consideró que no podía deberse, al menos en exclusiva, al ataque de la aviación.La realidad es que la mayor parte del daño fue causado por el incendio provocado por las bombas.Franco supo a los pocos días que los aviones italianos y alemanes eran los responsables del desastre, pero no quiso reconocerlo públicamente por suponer que ello molestaría a los alemanes, cuyo apoyo consideraba imprescindible para ganar la guerra.[cita requerida] El Ejército alemán utilizó los efectos del bombardeo como arma política en la guerra fría que mantenía con Inglaterra, y les interesó que la prensa mundial exagerase los resultados.Según Solé i Sabaté y Villarroya: Al día siguiente del bombardeo de Guernica el lendakari del Gobierno Vasco José Antonio Aguirre hizo pública una nota en la que denunciaba que los autores de la acción habían sido «los aviadores alemanes al servicio de los facciosos españoles».Las afirmaciones del lendakari Aguirre fueron contestadas por la propaganda franquista, que atribuyó la destrucción de Guernica al propio Ejército vasco:[36]​[37]​ Sin embargo, la versión oficial franquista se mantuvo durante toda la guerra y una vez terminada la guerra, por lo que el libro del George Steer no se publicó en España.La confirmación oficiosa se publicó en el tomo "Vizcaya" de las monografías sobre la guerra civil del Servicio Histórico Militar.En la carta de respuesta del cardenal Gomá a Onaindía le escribe: «Los pueblos pagan sus pactos con el mal y su protervia en mantenerlos».
Bomba incendiaria de 1 kg de la Luftwaffe , 1936.
Vista aérea de Guernica tras el bombardeo
Memorial de las víctimas del Bombardeo de Guernica en el terreno del antiguo aeródromo de Salburua , en Vitoria, de donde partieron los aviones
Mural situado en Guernica y Luno que reproduce el famoso cuadro pintado por Pablo Picasso . El texto inferior dice: «El Guernica a Guernica».
Museo de la Paz de Gernika