Bombardeo de Lérida

[1]​ Por su parte, Lérida, que se hallaba en la retaguardia republicana del Frente de Aragón, no había sufrido hasta la fecha ningún bombardeo.

[3]​ «En pocos segundos la ciudad se convirtió en un infierno y sus calles en un campo sembrado de cadáveres».

[2]​ Las bombas de los aviones cayeron en numerosos puntos del casco urbano, especialmente en los alrededores del Puente viejo, la Calle Mayor, el Mercado de San Luis, la sede local del Banco de España y el Liceo Escolar.

Como ha señalado la historiadora Mercè Batallat citada por Solé i Sabaté y Villaroya:[5]​

El elevado número de muertos causó un escándalo internacional.

Monumento a las víctimas del Liceo Escolar erigido en la avenida Blondel en 2006. Es obra del escultor ilerdense Agustí Ortega .