El general soviético Iván Kónev lanzó el ataque contra las tropas alemanas de Bohemia liderando el Primer Frente Ucraniano, ayudado por el Segundo y Cuarto Frente Ucraniano a cargo de los generales Rodión Malinovski y Andréi Yeriómenko, respectivamente.
Los alemanes cercados en Bohemia sumaban unos 900 000 soldados, restos del Grupo de Ejércitos Centro, comandados por el general Ferdinand Schörner, así como un contingente de tropas austríacas unidas a la Wehrmacht y lideradas por Lothar Rendulic.
No obstante, los gobiernos de Estados Unidos y la URSS ya habían acordado meses antes que ninguno de ambos aliados aceptaría como prisioneros a los soldados cuyas unidades habían luchado contra el otro aliado.
En paralelo, el último jefe del Protectorado de Bohemia y Moravia, el líder nazi Karl Hermann Frank, había prometido que mantendría el dominio alemán sobre el territorio checo mientras tuviese fuerzas para ello, amenazando con "ahogar en un mar de sangre" todo intento de revuelta y dictando unas 1.357 ejecuciones.
Al enterarse de que los alemanes no pensaban retirarse hacia el oeste sino luchar, los jefes del ROA decidieron entregar su apoyo a los partisanos checos, esperando vanamente que esta alianza de última hora les permitiría a los hombres de Vlásov rendirse a los estadounidenses.
Tropas estadounidenses habían tomado para entonces todo el oeste de Bohemia (incluyendo ciudades como Pilsen y Karlovy Vary llegando a pocos kilómetros de Praga, pero el general Dwight D. Eisenhower había prohibido al general George S. Patton, jefe del Tercer Ejército de los Estados Unidos lanzar sus tropas hacia la capital checa para así dar tiempo a que arribasen allí los soviéticos y evitar así complicaciones políticas entre ambos aliados.
Lo que Schörner y sus colegas no sabían era que el comandante supremo aliado en Europa Dwight D. Eisenhower había dado la orden a sus tropas de no avanzar más allá del Elba, y así dejar la mayor parte de Checoslovaquia al Ejército Rojo.
Cuando los alemanes se rindieron, fueron capturados casi 800 000 hombres del Grupo de Ejército Centro, aunque algunos grupos y unidades habían huido hacia el Oeste para rendirse allí a las fuerzas norteamericanas.