Es el segundo municipio en importancia de la provincia tras la capital, por población y desarrollo socioeconómico.
En la parte inferior de este se reproducen unas ondas de plata y azur que hacen referencia al río que pasa por el municipio, el río Henares.
En la parte superior del escudo se localiza una corona real cerrada.
[3] La localidad está situada a una altitud de 644 m s. n. m.[4][5] La ciudad se ubica en el Corredor del Henares, un área altamente industrializada.
[6] Si bien, el nombre del lugar también podría venir dado del árabe azouque, cuyo significado sería mercadillo, aunque no hay cierta constancia de que Azuqueca haya albergado nunca una tradición comerciante.
[7] Otras teorías menos seguidas hablan del diminutivo del árabe andalusí assuqayqa o suwayqa que significaría tallito, o bien que el topónimo guarda relación con la advocación a San Isidro labrador, patrón tanto de Azuqueca de Henares como del barrio toledano de Azucaica.
No fue hasta los años 60 del siglo XX cuando se empezó a producir un notable cambio.
Comenzó instalándose alguna pequeña fábrica hasta que se instaló en los terrenos entre la carretera N-II y las vías del ferrocarril, en la salida de la localidad, las fábricas VICASA y Fibras Minerales SA, ambas del sector vidriero.
Desde entonces, Azuqueca comenzó a recibir población procedente del campo y de otros municipios vinculados a las empresas recién establecidas para trabajar en las fábricas de la localidad, convirtiéndose en una ciudad industrial.
Abarcan diversos campos como los de juventud, limpieza, festejos, educación, infraestructuras, urbanismo, vivienda.
hacienda, deportes, Europa, etc. Pocos son los vestigios que quedan del pasado en Azuqueca.
Si bien, urbanísticamente sigue la misma fisonomía que el resto de los pueblos de la zona: una iglesia en el centro del pueblo y alguna que otra ermita repartida por los alrededores.
Entre algunas de las especies arbóreas que se encuentran, destacan el Ginkgo biloba (nogal del Japón, considerado un fósil viviente) o Sequoiadendron giganteum (secuoya gigante, especie que destaca por sus dimensiones).
Junto al río Henares, en los terrenos de la antigua depuradora del municipio, se creó la reserva ornitológica de Azuqueca como un lugar protegido para la flora y la fauna de la ribera del Henares y como un punto para la difusión y la educación medioambiental.
La reserva ocupa una extensión de unas 12 ha y cuenta con cuatro grandes estanques.
A su vez, se emplazan en la localidad dos polideportivos municipales y una piscina climatizada con gimnasio inaugurada en 2007.
En ellos se cursan distintos ciclos formativos de grados medio y superior.
Un centro de salud dio servicio a toda la localidad durante muchos años hasta que fue cerrado.