La expresión popular dice que Atila decía «donde mi caballo pisa no crece hierba».Atila cruzó el Danubio e invadió y saqueó dos veces los Balcanes, pero fue incapaz de capturar Constantinopla.Posteriormente invadió Italia, devastando las provincias septentrionales, y logró hacer huir al emperador de Occidente Valentiniano III de su capital, Rávena, en el 452,[3] pero no pudo tomar Roma.Tras la muerte de Atila, su consejero más cercano, Ardarico de los Gépidas, lideró una revuelta germánica contra el dominio huno, tras la cual el Imperio Huno se derrumbó rápidamente.A los romanos, por su parte, les interesaban unas condiciones lo más estables posibles en la vecina Barbaricum para asegurar sus fronteras.Escribió una historia del Bajo imperio romano en ocho libros que abarcan el periodo comprendido entre 430 y 476.Los escritores húngaros del siglo XII deseaban presentar a los hunos bajo una luz positiva como sus gloriosos antepasados, por lo que suprimieron ciertos elementos históricos y añadieron sus propias leyendas.Atila es un personaje importante en muchas epopeyas medievales, como el Cantar de los nibelungos, así como en varias Eddas y sagas,[6][8] a menudo como la figura legendaria del rey Etzel.Al año siguiente, Atila y Bleda tuvieron un encuentro con la legación imperial en Margus (actualmente Pozarevac) y, sentados todos en la grupa de los caballos a la manera huna, negociaron un tratado.Atila y Bleda amenazaron con la guerra abierta, sosteniendo que los romanos habían faltado a sus compromisos y que el obispo de Margus (cercana a la actual Belgrado) había cruzado el Danubio para saquear y profanar las tumbas reales hunas de la orilla norte del Danubio.Su avance comenzó en Margus, ya que cuando los romanos debatieron la posibilidad de entregar al obispo acusado de profanación, este huyó en secreto a los bárbaros y les entregó la ciudad.Hechos estos preparativos, consideró que podía permitirse rechazar las exigencias de los reyes bárbaros.Más tarde, presionando a lo largo del Nisava ocuparon Sérdica (Sofía), Filípolis (Plovdiv) y Arcadiópolis.Satisfechos durante un tiempo sus deseos, los reyes hunos se retiraron al interior de su imperio.Existe abundante especulación histórica sobre si Atila asesinó a su hermano o si Bleda murió por otras causas.Los hunos quedaron sin oposición y se dedicaron al pillaje a lo largo de los Balcanes, llegando incluso hasta las Termópilas.Constantinopla misma se salvó gracias a la intervención del prefecto Flavio Constantino, quien organizó brigadas ciudadanas para reconstruir las murallas dañadas por los sismos (y, en algunos lugares, para construir una nueva línea de fortificación delante de la antigua).Atila había tenido anteriormente buenas relaciones con el imperio occidental y con su gobernante de facto, Flavio Aecio.En cualquier caso, en la primavera del 450, la hermana de Valentiniano, Honoria, a la que contra su voluntad habían prometido con un senador, envió al rey huno una demanda de ayuda juntamente con su anillo.Aunque es probable que Honoria no tuviera intención de proponerle matrimonio, Atila escogió interpretar así su mensaje.Bury piensa que la intención de Atila al marchar hacia el oeste era la de extender su reino –ya para entonces el más poderoso del continente– hasta la Galia y las costas del Atlántico.En el 451 su llegada a Bélgica con un ejército que Jordanes cifra en 500.000 hombres puso pronto en claro cuáles eran sus verdaderas intenciones.Atila apareció de nuevo en el 452 para exigir su matrimonio con Honoria, invadiendo y saqueando Italia a su paso.Su ejército sometió a pillaje numerosas ciudades y arrasó Aquilea hasta sus cimientos.Cualesquiera que fuesen sus razones, Atila dejó Italia y regresó a su palacio más allá del Danubio.Desde allí planeó atacar nuevamente Constantinopla y exigir el tributo que Marciano había dejado de pagar.[cita requerida] El nombre de Atila podría significar «Padrecito», del gótico «atta» (padre) con el sufijo diminutivo «-la», ya que sabemos que muchos godos sirvieron en sus ejércitos.Podría ser también una forma preturca, de origen túrquico (compárese con Atatürk y con Alma-Ata, la actual Almaty).
El mundo del Mediterráneo sobre el 450 d. C.
El imperio huno se extendía desde las estepas de Asia Central hasta la actual Alemania, y desde el Danubio hasta el Báltico, con su sede en la actual Hungría.
La fiesta de Atila
, cuadro del pintor húngaro
Mór Than
. Se basa en el fragmento de Prisco, al que representa de blanco en la parte derecha, sosteniendo su libro de historia.
Atila y sus hunos invadiendo Italia, por
Ulpiano Checa
(1887).
El encuentro de San León Magno y Atila
, de
Rafael
, en el que se puede ver a San Pedro y San Pablo apoyando al papa desde lo alto en su encuentro con el rey huno.