Es un miembro de la familia del trigo y se relaciona estrechamente con la cebada.
El primer uso posible del centeno doméstico se remonta al Paleolítico tardío, en Abū Hurayra (colina actualmente inundada por una represa), en el valle del río Éufrates (al norte de Siria).
[6][7][8] Aunque la evidencia arqueológica de este grano se ha encontrado en contextos romanos a lo largo del Rin, del Danubio y en las islas británicas, Plinio el Viejo mencionaba desdeñosamente al centeno, escribiendo de este cereal que «...es un alimento muy pobre y solo sirve para evitar el hambre», y el trigo se mezcla en él «...para mitigar su sabor amargo, y aun así es muy desagradable al estómago»[9] Desde la Edad Media, el centeno ha sido ampliamente cultivado en Europa y es el principal cereal utilizado para producir pan en zonas al este francés, alemán y la frontera norte de Hungría.
El centeno crece bien en suelos mucho más pobres que los necesarios para la mayoría de los otros cereales.
Por ello, es un cultivo especialmente valioso en regiones donde el suelo tiene arena o turba.
Las plantas de centeno soportan el frío mejor que otros granos pequeños.
Su crecimiento vigoroso elimina incluso a competidores como malas hierbas y el centeno puede cultivarse sin aplicar herbicidas.
[13] El centeno puede verse afectado por diversas enferemedades de origen bacteriano, fúngico, por nematodos o viricos.
Históricamente, los países nórdicos húmedos que han dependido del centeno como cultivo básico estaban sujetos a epidemias periódicas de esta enfermedad.
[10] Los métodos modernos de limpieza y molienda del grano han eliminado prácticamente la enfermedad, pero la harina contaminada puede acabar en el pan y otros productos alimenticios si el cornezuelo no se elimina antes de la molienda.
[cita requerida] También se dice que podría ser activo en la prevención del cáncer de próstata.
Su bajo contenido en gluten permite que no se formen grumos, su pH es muy similar al del cuero cabelludo, y contiene ácido pantoténico (vitamina B5), muy utilizada en los champús convencionales.
Moir, el 1932, observó que la administración de extracto de centeno banyut acuoso por vía oral se asocia con contracciones uterinas muy pronunciadas y vigorosas, que se conocen como efecto John Stearns.
Casi simultáneamente, desde otros tres centros, se anunció el aislamiento de un nuevo extracto de centeno banyut soluble en agua: en los Estados Unidos (Davis, 1935), en el Reino Unido (Thompson, 1935) y en Suiza (Stoll, 1935).
Los norteamericanos denominaron a su preparación ergonovina y los suizos utilizaron el nombre de ergobasina.
A principios del siglo XX, los químicos aislaron del cornezuelo un conjunto de alcaloides con efectos muy diferentes: uno estimula el músculo uterino, otros son alucinógenos y algunos constriñen los vasos sanguíneos.
En 1943, el científico suizo Albert Hofman descubrió la variante particular que alcanzó tanta fama en la década de 1960: la alucinógena dietilamida del ácido lisérgico o LSD.
También prospera en Norteamérica: Canadá, Estados Unidos; Sudamérica: Argentina, Brasil; Asia: Turquía, Kazajistán, y norte de China.
El triticale es un cereal híbrido, producto del cruzamiento entre trigo y centeno.