Es parecido a la regañá española, o al llamado hardtack en inglés, y es de larga conservación en ambiente seco.
Aunque antiguamente era frecuente hornearlo en casa, actualmente se fabrica en forma industrial.
Antiguamente se secaban utilizando una vara que atravesaba los orificios del centro.
El resultado es una galleta dura, muy porosa y liviana, de alto valor energético.
Se estima que era un alimento importante en la dieta de los vikingos, por su larga duración y su liviano peso.