Revolución boliviana de 1952

La Revolución boliviana de 1952, conocida como Revolución del '52, fue un proyecto político en apariencia liderado por el partido denominado Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y que, en alianza con liberales y comunistas, pretendió implantar un nuevo modelo socioeconómico en Bolivia.Tuvo como figuras principales a los presidentes Víctor Paz Estenssoro y Hernán Siles Zuazo.Cuando las tropas del ejército fueron sobrepasadas por la muchedumbre, Urriolagoitia admitió tácitamente y con desagrado su derrota al retirarse del poder, momento en que se llamó a los dirigentes del MNR para que asumieran el gobierno, pero con la petición pública de que se pusiera en vigencia el voto universal (hombres, mujeres, citadinos, rurales), la reforma agraria, y la nacionalización de las minas, todas aceptadas por el MNR, porque en la práctica jamás fueron propuestas por el mismo (puede verificarse en los archivos históricos de la época) y puestas en vigencia a través del esfuerzo de los primeros parlamentarios legítimamente representantes del pueblo como el líder minero Juan Lechín Oquendo y otros.Por un lado, el partido del MNR, cuyos principales pensadores fueron Carlos Montenegro y Augusto Céspedes, tuvo influencia de los nacionalismos europeos: desde Oswald Spengler hasta Benito Mussolini.[2]​ Esto explica que en los años cuarenta el partido haya tenido una influencia fascista y antisemita.Sin embargo, el impacto más importante de la Revolución del 52 fue haber incorporado el indigenismo al debate sociopolítico hegemónico.Esta apertura a nuevas ideologías abriría posteriormente espacios para otras corrientes más radicales, como el indianismo, del filósofo anticristiano Fausto Reinaga en los años setenta, o el Movimiento Al Socialismo (MAS), liderado por el dirigente cocalero Evo Morales en la primera década del 2000.Asimismo, el gobierno nacionalista del abogado Hernando Siles Reyes (1926-1930) trató de aplicar medidas correctivas a algunos problemas socioeconómicos fundamentales en el país.El gobierno reaccionó con intervención militar y la trágica Masacre de siglo XX.Luego de unos días, emergió un gobierno revolucionario en el departamento de Santa Cruz al oriente del país, y estuvo liderado por Edmundo Roca, miembro del grupo Acción Obrera, que se incorporó al MNR.[5]​ Mientras tanto, Urriolagoitia movilizó al ejército comandado por el general Ovidio Quiroga, quien logró reconquistar primero Cochabamba y después Santa Cruz.[5]​ En Potosí, luego de retomar la plaza principal, se fusiló en el Cuartel Manchego a algunos cabecillas del movimiento, como Lidio Ustárez.Algunos trabajadores tomaron las minas y se declaró huelga en varios centros industriales de mineral.Pero el general Torres Ortiz, comprometido en el alzamiento, se desmarcó a última hora e hizo acuartelar al ejército.Viendo el incontrolable desborde popular, renuncia el general Seleme a la conducción del “Gobierno Revolucionario”.Al final, el doctor Siles Suazo cedió pues Lechín argumentó que esas consignas llevaron a la gente a ofrendar su vida, y era la inmensa multitud que estaba, en ese mismo instante, afuera, en la plaza, coreando la victoria revolucionaria.Hernán Siles Zuazo y Juan Lechin Oquendo asumieron el mando del gobierno hasta que unos días más tarde regresó Víctor Paz Estenssoro, que estaba desterrado en Buenos Aires.En 1955 también se aprobó el nuevo Código Petróleo que permitía el acceso de empresas extranjeras a la exploración y explotación petrolífera.Durante este período se incrementó el desarrollo agrícola y el tercer gobierno del MNR, fue el segundo período presidencial de Paz Estenssoro (1960-1964) en el que se dedicó a reformar la recientemente creada Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL) (ver abajo), construir infraestructura y consolidar la llamada "Marcha al Oriente."[8]​ A la misma vez, las relaciones laborales durante el gobierno del MNR fueron turbulentas.Fue más bien el movimiento obrero, a través de la FSTMB, que demandaba la nacionalización.Adicionalmente, los indígenas tenían que aportar con semillas, herramientas y hasta animales para realizar el trabajo.El costo de vida en La Paz incrementó a una tasa promedio anual del 146,6 % entre 1952 y 1956.El segundo gobierno del MNR, con Hernán Siles Zuazo en la presidencia, tuvo que afrontar esta crisis con un programa de estabilización.[25]​ Sobre el gradual proceso y los efectos de la ayuda estadounidense a Bolivia, Sergio Almaraz anotaba:Según Klein esta ayuda fue "decisiva para la seguridad y el crecimiento económico de Bolivia."En dichos centros de hacinamiento y castigo se torturó a numerosos opositores políticos al MNR, tanto comunistas como falangistas.Entre las víctimas de los campos de concentración se encuentran los filósofos Numa Romero del Carpio y Roberto Prudencio Romecín, cuyos domicilios fueron además saqueados, y se quemó sus libros.[30]​ Así, se mantuvo controlada a buena parte de los sectores laborales, burocráticos, universitarios o estudiantiles.Pero al mismo tiempo este partido y sus muchos desprendimientos e imitadores han contribuido poderosamente a consolidar prácticas y valores convencionales, propios del mundo premoderno, que van desde el caudillismo hasta el autoritarismo, rejuveneciendo así los elementos menos rescatables del orden tradicional.
Revolución Nacional, abril de 1952
La reforma agraria en Bolivia, 1953