[5][6] Empezó su carrera artística llamándose Borloni, pero tras llegar a España acabó decantándose por Bosè[2] (o, castellanizado, Bosé).
Antonioni, en 1953, ofrece a Bosè el papel de Clara Manni, en una película que narra la historia de una empleada que se convierte en actriz, se hace inmediatamente famosa y, luego, sufre un doble fracaso, sentimental y profesional: se trata del amargo La signora senza camelie, película sobre la dimensión poco auténtica del mundo cinematográfico, fiel espejo de la aridez que caracteriza las relaciones entre los seres humanos.
La actriz se dedicó a la comedia rosa tardo-neorrealista, interpretando dos de los títulos más famosos de la filmografía de Luciano Emmer: el divertido París, siempre París (1951), con Aldo Fabrizi y, sobre todo, Tres enamoradas (1952), en la cual personificó a una modista que, tras convertirse en maniquí, no olvida sus orígenes modestos ni el amor por su novio, simple pero simpático.
En Así es la aurora, dirigida por Luis Buñuel al volver a Francia tras su estancia en México, interpretó a Clara, una joven viuda italiana que reside en Córcega y vive una purísima historia de amor con el médico Valerio (George Marchal); cabe recordar que esta película es la única del genial cineasta aragonés con un final feliz.
[cita requerida] En el Satiricón (1969), de Federico Fellini, Bosè aparece en una sola y memorable escena, pero en Sotto il segno dello Scorpione, el lúcido apólogo abierto a muchas claves de lectura que los hermanos Paolo y Vittorio Taviani dirigen en el mismo año, Bosè fue la protagonista, al lado de Gian Maria Volonté y Giulio Brogi.
La actriz mostró su madurez artística y su capacidad de introspección psicológica en Nathalie Granger (1972), película dirigida por Marguerite Duras en la cual es Isabel, la madre de la niña que da el nombre a la película.
Vivía en Brieva, España, país al que se había ligado sentimentalmente desde muchos años atrás.
[12]Más adelante, su hija Lucía Dominguín declaró en una entrevista en el programa Sábado Deluxe que su madre murió de una neumonía no relacionada con el coronavirus, "ya que desde hace años tenía achaques, iba al hospital y le ponían oxígeno".
Pero que no pudo recibir ese tratamiento debido a la pandemia.