Fernando María Castiella

Continuó en el curso 1932-1933 sus estudios de derecho internacional en La Haya, Ginebra y Cambridge.Comenzó a enseñar derecho internacional en el recién creado Centro de Estudios Universitarios (CEU).[10]​ Se efectuaría, según Julio Rodríguez Puértolas, la identificación entre las luchas del fascismo español y el europeo.[11]​ El libro llegó a ser considerado «altamente ofensivo» por la diplomacia británica.[12]​[n.[15]​[16]​ Durante la Segunda Guerra Mundial se alistó y fue voluntario en la División Azul en el Frente Oriental.Estuvo encargado de transmisiones, enlace en moto y lucha en primera fila en algunas ocasiones, regresando en 1942.En 1951 fue destinado al Vaticano para sustituir a Joaquín Ruiz-Giménez como embajador ante la Santa Sede.El tratado significó el reconocimiento de la Iglesia Católica en España y una serie de privilegios políticos, legales, económicos y fiscales, como que los matrimonios canónicos fueran obligatorios para todos los católicos, exenciones fiscales para sus bienes y actividades o el derecho de constituir universidades.En la carta, partiendo de la vocación europea del país, su situación geográfica y sus intereses económicos, solicitaba una asociación con la Comunidad, que teniendo en cuenta su situación económica, permitiera más adelante su definitiva incorporación.[38]​ Esta fue la primera vez que un país con un régimen dictatorial europeo solicitaba su inclusión en la CEE.Los cambios fundamentales que supusieron fueron, entre otros, una sociedad más industrial con un fuerte crecimiento del sector servicios en merma de la agricultura.La apertura al exterior pretendía un aumento de los intercambios comerciales a través de la integración de España en los diferentes organismos y organizaciones internacionales y así lo hacía constar el la carta, siendo las ventajas económicas (reciprocas) las que impulsan toda la redacción, así cuando menciona “Preocupado mi Gobierno con acelerar el desarrollo económico del país” o cuando se refiere a las exportaciones agrícolas “son un Capítulo fundamental del comercio exterior español”.Castiella fue conocido por su lucha para conseguir que la plaza de Gibraltar volviera a ser española.[39]​ Castiella llegó a ser conocido como el «Ministro del Asunto Exterior» (por su empeño en recuperar Gibraltar).[40]​ La verja volvería a ser abierta trece años más tarde y por presión británica por el Ministro de Exteriores Fernando Morán.[45]​ Fue enterrado al día siguiente en el cementerio de Derio (Vizcaya), en un acto presidido por Marcelino Oreja.«Para un hombre con un fuerte sentido del deber y del servicio a la Nación, aquellos años vividos en el Palacio de Santa Cruz debieron ser difíciles y, a menudo, muy ingratos."Portero considera que "Castiella representa la madurez de la política exterior española, con sus contradicciones e inevitables tensiones.Durante décadas, en la dictadura o en la democracia, nos hemos movido dentro de los escenarios que él esbozó y a través de diplomáticos que, en gran medida, se formaron con él o en su legado.Según Marcelino Oreja Aguirre, la voluntad de Castiella de perseguir una política exterior a largo plazo y objetiva que trascendiera el sistema a corto plazo no fue siempre congruente con la política interior del país.[49]​ Sus posturas en lo referente a la cuestión de la descolonización encontraron fricciones con las defendidas por Luis Carrero Blanco.[52]​ Fernando María Castiella estuvo casado con Soledad Quijano Secades (Santander, 1920-Madrid, 2014) y tuvo cuatro hijos: Fernando (1947-2003), Sol Pía, María Begoña y Cristina M. Luisa Castiella Quijano.
Castiella chocó con Luis Carrero Blanco en cuestiones como el proceso de descolonización o la libertad religiosa.
La visita del presidente estadounidense Dwight Eisenhower a España en 1959 es considerada el símbolo del fin del aislamiento internacional de España. [ 33 ]
Fotografiado en 1959 en Fuenterrabía con el ministro francés Maurice Couve de Murville en los fastos del tricentésimo aniversario del Tratado de los Pirineos .
Escudo como caballero de la Orden de Carlos III .