Miguel Primo de Rivera y Sáenz de Heredia

Trasladado a Madrid el 1 de mayo, sufrió cautiverio con su hermano José Antonio y otros falangistas.

[5]​ Su parentesco con el fundador de la Falange y su cautiverio en la zona republicana le convirtieron en una figura conocida.

[6]​ Oportunista[7]​ y carente del carisma de su hermano José Antonio, no llegó a jugar ningún papel relevante en el régimen franquista.

[8]​ No obstante, su apellido le garantizaría el desempeño de altos puestos políticos.

Durante su etapa como gobernador civil se vio envuelto en numerosos casos de estraperlo y negocios oscuros.

Fue tío del político Miguel Primo de Rivera y Urquijo.