José María de Areilza
Finalmente, los comicios en Bilbao dieron como resultado el triunfo del Frente Popular y los nacionalistas vascos.Tras la Alcaldía bilbaína, participa en la constitución del nuevo régimen y el Movimiento Nacional.Es nombrado jefe del servicio nacional de Enseñanza Profesional y Técnica, funciones que desempeña un mes escaso dada su designación como jefe del servicio nacional de Industria (2-3-1938).José María Areilza entabla conversaciones diplomáticas con las embajadas de Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia en Madrid a fin de valorar los apoyos a dicha intervención.Pero su función alcanza una dimensión internacional al ser nombrado Embajador de España en Argentina (1947-1950), Estados Unidos (1954-1960) y Francia (1960-1964).Durante su primer destino en Buenos Aires, se firma el protocolo Franco-Perón (1948) de cooperación económica y un posterior convenio adicional (1949).Areilza ofrece a Estados Unidos una España anticomunista, con una nueva y eficaz estructura que Franco ha sabido imprimirle, lo cual le garantiza estabilidad y continuidad.[11][12] Tras seis años en la embajada estadounidense, en 1960 cumple con nuevo destino en Francia.Las conversaciones que, por esas fechas, mantiene con Franco sobre la necesidad de apertura del régimen hacia un sistema democrático, vigente en Europa occidental, resultan infructuosas.[13] José María de Areilza dedica su siguiente etapa a trabajar al frente del movimiento monárquico en España.Sus planteamientos evolucionan hacia la implantación en la España postfranquista de una monarquía no continuista, sino democrática y homologable a las instituciones monárquicas europeas, que habían aceptado plenamente el sistema democrático.En la década de los setenta se situó en la oposición liberal al régimen de Franco, expresando su desacuerdo en repetidas ocasiones, colaborando desde la prensa y desplegando actividad como conferenciante.En julio de 1975 nace FEDISA, grupo de signo centrista, del que forma parte Areilza junto con José Luis Álvarez Álvarez, democristiano, Pío Cabanillas, Francisco Fernández Ordóñez, socialdemócrata, y Marcelino Oreja, entre otros.Este transmite su decisión de no continuar en el nuevo gabinete, tampoco lo hará Manuel Fraga.José María Areilza estima que se ha perdido tiempo en estos siete meses de monarquía con Arias Navarro y en política el factor tiempo es esencial (El Correo Español, 22-7-1976).[15] Ante el bloqueo institucional, Areilza propone dar a la nación una constitución que establezca definitivamente las bases de una monarquía democrática.Se muestra firme en el papel del rey como motor de cambio (frase que acuña en un acto en el periódico La Vanguardia, en Barcelona), en la legalización del Partido Comunista, que acabará por imponerse, y en arbitrar fórmulas para la autonomía regional de Cataluña y el País Vasco.Enseguida se establecen alianzas para las candidaturas posibles, de las que surge Coalición Democrática (CD), que reúne a Manuel Fraga, Federico Silva y Alfonso Osorio.Desde las columnas periodísticas trasmitió sus reflexiones, con artículos de opinión en ABC, El Correo Español y La Vanguardia.