Servicio Exterior de Falange

Durante la Segunda Guerra Mundial tuvo un papel relevante, especialmente entre las poblaciones españolas de Sudamérica o Filipinas.

[9]​ En sus primeros momentos de existencia, el Servicio Exterior de Falange mantuvo muchas similitudes con la Auslandsorganisation (AO) del Partido nazi alemán, aunque también con los Fasci all'Estero del Partido Nacional Fascista.

[11]​ Pasó a denominarse Delegación Nacional del Servicio Exterior de Falange (DNSEF).

[27]​ El organismo se convirtió en un instrumento del régimen franquista para difundir su ideología por los países iberoamericanos.

[27]​ La Falange Exterior también desarrolló una importante actividad en los países del Eje, a pesar de la situación bélica.

[25]​ Así pues, en detrimento de la actividad política, se acabó optando por utilizar la cobertura cultural como una plataforma desde la que seguir irradiando los planteamientos ideológicos.

[30]​ Aunque las actividades falangistas en Latinoamérica no tenían relación con la Alemania nazi, lo cierto es que la doctrina panhispanista de Falange encontraba acogida entre las élites dirigentes latinoamericanas, y constituía un desafío a la hegemonía norteamericana en la zona.

[21]​ Muy debilitada con respecto a su situación al inicio de la guerra, el Servicio Exterior continuó desarrollando sus acciones en el exterior, aunque cada vez en un contexto más difícil, y con una mayor falta de fondos.

Ya desde antes del final de la guerra,[44]​ el gobierno franquista intentó llevar a cabo la repatriación de menores y su retorno a España, aunque en ocasiones se encontró con no pocas dificultades para realizar dicho objetivo.

[47]​ Entre los principales países receptores de niños evacuados por la República se encontraban Francia, Reino Unido, Suiza o Bélgica, cuyas autoridades cooperaron estrechamente con el régimen franquista en la repatriación.[48]​[n.

Una de estas publicaciones, la revista Arriba España, fue editada en Buenos Aires, La Habana, La Paz, Panamá, San José de Costa Rica, etc.[27]​ En Filipinas se editaron dos publicaciones: Yugo, y posteriormente Amanecer.

[5]​ Posteriormente, se establecerían nuevas jefaturas en Alemania, Portugal, Reino Unido y varios países de Centroamérica.

[5]​ En Puerto Rico —territorio bajo control estadounidense— llegó a tener una importante presencia y actividad.

[9]​ Por su parte, en la Alemania nazi la Falange Exterior dispuso de una importante red con centros en varias ciudades alemanas, como Berlín o Hamburgo.

[15]​ En la Italia fascista tuvo delegaciones en varias ciudades importantes, estando dirigida inicialmente por el marqués de Zayas.

[63]​ En adelante, más falangistas se trasladaron a Argentina y desarrollaron una activa labor en este país.

Para octubre de 1938 la Falange tenía establecidas en todo el territorio unas sesenta delegaciones.

[17]​ En mayo de 1939 el gobierno argentino aprobó un decreto por el cual el Estado tomaba el control sobre todas aquellas asociaciones extranjeras.

[64]​ Las actividades de FET y de las JONS en el país fueron suspendidas unos meses más tarde, aunque se creó una nueva entidad —la Hermandad Hispano-Argentina— bajo cuya cobertura pudieron seguir ejerciéndose las actividades políticas.

Allí estuvo activa una sección local del partido ya desde una fecha tan temprana como junio de 1936; durante el tiempo que duró la guerra civil en España llegó a sufrir numerosos conflictos internos e incluso alguna escisión.

Serrano Suñer y Himmler , junto a otros oficiales en la sede de la división «Adolf Hitler» , en Berlín (1940).