Tenía una extensión de 2.552,13 km² y su fuero fue concedido en el año 1149 en torno a la villa del mismo nombre, rubricando a la población y sus aldeas cercanas con la categoría de Comunidad de Villa y Tierra.Gozó desde entonces y hasta el siglo XIV de una gran prosperidad, llegando a poseer hasta 8000 habitantes, pero después, entró en un lento y constante declive a costa del ascenso de la vecina Sigüenza.Conquistada por Alfonso VI de Castilla la fortificada Atienza en 1085, inmediatamente inicia el desarrollo de su posterior poderío social y económico, recibiendo en 1149 de manos de Alfonso VII un Fuero y la asignación de un territorio enorme, que desde la sierra de Pela continuaba por el Castillo de Diempures (en Cantalojas), bajando el límite por el Sorbe; el Ocejón luego, hasta Padilla de Hita, la meseta alcarreña por Miralrío, y el Badiel con Valfermoso de las Monjas, llegando hasta el Tajo, hasta Gualda, incluyendo tierras del Recuenco y Armallones, mostrando su límite oriental por Sigüenza, recostado sobre el Común de Villa y Tierra de Medinaceli.Sus extremos estaban fortificados con castillos de la talla de Alcolea de las Peñas, Tordelrábano, Valdelcubo, Torremocha, Paredes, etc. Primitivamente, Castejón se incluía en su alfoz.Así, en el siglo XII se desgaja el Señorío de Beleña; en el siglo XIII se le desprenden los Comunes de Jadraque y Cifuentes, y en el siglo XIV pierde la zona de Galve, que como Señorío de los Orozco y luego de los Estúñigas comprendía Valdepinillos, La Huerce, Zarzuela de Galve, Valverde de los Arroyos, Umbralejo, Palancares, el mismo Galve y los despobladdos de Castilviejo, Pero Yuste y La Mata de Robledo.