Negredo

A una altitud de 987 m sobre el nivel del mar, el término municipal presenta una geografía de meseta surcada por colinas y montes, que forman numerosos valles en cuyo fondo descansan arroyos que, en épocas lluviosas, aparecen superficialmente.

Se puede llegar a través de la carretera CM-101, en su desvío con la GU-156 que da acceso al pueblo.

Hacia mediados del siglo XIX, el lugar tenía contabilizada una población de 151 habitantes.

[9]​ La formación vegetal característica en Negredo es el encinar, que en combinación con el enebro dan un color verde oscuro perpetuo al monte colindante.

El sotobosque suele estar constituido por arbustos como aliagas (Genista scorpius) o rosales silvestres (Rosa canina), y viene completado por abundantes grupos de espliego (Lavandula angustifolia), tomillo (Thymus) o ajedrea (Satureja montana).

Otras especies presentes son la lechetrezna (Euphorbia helioscopia), la jara (Cistus) o el espino (Crataegus).

El edificio permaneció abandonado durante años, motivo por el cual desde 2018 se vienen realizando trabajos de rehabilitación en la fachada y portada.

Las cabañas suelen adquirir forma de iglú: las piedras se iban amontonando unas sobre otras a partir de una planta circular que iba cerrándose a medida que adquiría altura, dejando un pequeño acceso lateral.

Se puede ver un ejemplar de estas construcciones en el sendero que parte desde Negredo hacia Viana-Baides.

Además, hay varias fuentes tanto dentro del pueblo como en los senderos y sus alrededores.

Resulta tradicional la celebración de una misa y posterior procesión, en la que se exhibe la figura del Santo patrón.

Es muy común la realización de una subasta durante los días principales entre los vecinos del municipio, en la que se puja por artículos aportados por los mismos participantes.

En cualquier caso, el arroyo del Sargal continúa sin pérdida, dirección sur, hasta encontrarse con la carretera de Torremocha.