Enviado luego a las Indias Occidentales sufrió un elevado número de bajas por enfermedad.Charlemont fue retirado del mando del regimiento por Peterborough, lo que al ser apelado ante la reina fue resuelto finalmente por un consejo de oficiales que aconsejó a la reina promover a Charlemont a mayor general y dar el comando efectivo al teniente coronel Thomas Alnutt.Su comandante fue herido y hecho prisionero junto a otros 12 oficiales.Recuperado el cuerpo de oficiales por intercambio, se inició una nueva recluta para recomponer el regimiento, organizada con sede en Chester y Nantwich.Al estallar la sublevación jacobita el regimiento fue enviado a Escocia para sumarse en Stirling a las tropas del duque de Argyle y su hermano, el Earl de Ilay, antiguo coronel del regimiento.Una vez finalizado el conflicto, el regimiento permaneció estacionado en Dumbarton hasta 1718 en que regresó a Irlanda.Ese año el brigadier general Sir Charles Hotham reemplazó a Egerton, sólo para ser reemplazado el año siguiente por el coronel John Pocock, sucedido a su vez en 1721 por el coronel Charles Lence.El regimiento regresó a Irlanda, donde permaneció varios años estacionado en Limerick.En 1732 Lence fue reemplazado por el brigadier general John Moyle, quien en 1737 fue sustituido por el coronel Humphrey Bland.Finalmente se decidió efectuar un desembarco en Cartagena, pero el regimiento volvió a Inglaterra.Para levantar el sitio de Stirling el ejército avanzó a Falkirk, donde fue atacado por los montañeses.En la batalla de Culloden permaneció en la segunda línea, por lo que su participación fue mínima y tuvo sólo seis heridos.En 1747 zarpó de Burntisland on the Forth rumbo a Inglaterra, donde embarcaron en Gravesend para Flandes.El regimiento tomó parte en la batalla de Laffeld (o Val) donde sufrió fuertes bajas y Cumberland se vio obligado a retirarse.Pasaron el invierno en Williamstadt y al año siguiente permanecieron en campaña hasta la firma de la paz en octubre.Ese año Fleming murió y fue sucedido por el coronel Lord Robert Manners.En 1756 se reinició la guerra con Francia y el 36.º al igual que otros regimientos levantó un segundo batallón, el cual fue separado con el número 74.º en 1758.Mientras, el 36.º permaneció acampado en Barham Downs al mando del general Charles, Duque de Marlborough.El mal clima impidió posteriores intentos por lo que la flota regresó a sus bases.En 1773 regresó a las islas británicas y en 1774 su compañía ligera recibió entrenamiento en Salisbury a cargo de Sir William Howe y tras una revista en Londres por el rey Jorge III se reintegró al regimiento.Durante esos años el general Pierson fue reemplazado por el coronel Henry St.La fortaleza se rindió después de que las tropas francesas hubieran mostrado fuertes sentimientos republicanos, protagonizando disturbios y amenazando con colgar el gobernador, quien pidió ayuda a los británicos.En 1804 se creó nuevamente un segundo batallón, reclutado en el condado Durham, que tuvo corta vida y no llegó a luchar en el extranjero (fue disuelto en Plymouth en 1814).En 1805 el 36.º acampó en Curragh como parte del ejército al mando de Lord Cathcart.En su parte el teniente general Sir Arthur Wellesley destacó la conducta del coronel Burne y su batallón: En una carta del 22 de agosto dirigida al secretario de estado Robert Stewart, Vizconde Castlereagh, Wellesley insiste en sus alabanzas a Burne y el 36.º a los que considera un ejemplo para la fuerza: «He recomendado de muy particular manera al coronel Burne del regimiento 36.º y le puedo asegurar que nada me dará más satisfacción que saber que se ha hecho algo por ese viejo y meritorio soldado».En 1820 seis compañías del regimiento partieron a Zante, en las Islas Jónicas, mientras las cuatro restantes pasaban en junio a Cefalonia para al siguiente año reunirse con las demás en Zante.En Inglaterra cambió su armamento y fue incorporado a la 2.ª brigada de la 1.ª división del ejército.En diciembre de 1878 126 voluntarios partieron a Sudáfrica para unirse al regimiento n.º 99 en la guerra anglo-zulú.