La huida a Egipto es un episodio del Evangelio de Mateo (2, 13-15) cuya variada iconografía ha sido representada en el arte desde la Antigüedad.El relato del Nuevo Testamento, muy breve y propio del Evangelio de Mateo, narra cómo un mensajero de Dios se aparece en sueños a José y le ordena que huya a Egipto junto con la Virgen María y el Niño Jesús, pues el rey Herodes lo estaba buscando para matarle (la matanza de los inocentes).Cristo ha hecho dignos testigos suyos a los que todavía no podían hablar.Según el libro del Génesis[12] Raquel murió cerca de Belén y allí la enterró Jacob.[16] El verbo «huir» utilizado en el evangelio de Mateo como parte de la expresión del ángel: «...toma al niño y a su madre y huye a Egipto...» (Mt 2:13), acompañado por la sobriedad del relato, es contrario al tono usado por la literatura apócrifa en general (ver sección siguiente), que se basa en milagros para hacer más fáciles las cosas.[17] Egipto era el país clásico de refugio político por ser provincia romana.Allí había muchos judíos, colonias florecientes y barrios habitados por ellos que prestaban socorro a sus conciudadanos.Mateo es el único que nos habla de ello, sin datos precisos.Herodes murió, probablemente, en marzo o abril del año 4 antes de la era cristiana.Cornelio a Lapide comenta esta cuestión, escribiendo: "En hebreo nazir, o nozeri, escrito con zain, significa separado, santo, consagrado, coronado, religioso, porque Cristo, como hombre, estando separado de toda otra cosa, estaba hipostáticamente y totalmente unido a la PALABRA.Una lectura tipológica interpreta el cumplimiento como algo que se encuentra en la historia nacional de Israel y el cumplimiento antitípico como algo que se encuentra en la historia personal de Jesús.Mateo ve que este texto también apunta hacia adelante, cuando Jesús, el eterno Hijo primogénito (Rom 8:29), es liberado del tirano Herodes y más tarde sacado de Egipto (2:21)."[26] Asimismo, The Orthodox Study Bible afirma que la cita de Oseas 11.1 "se refiere primero a Israel siendo sacado del cautiverio.Las iglesias ortodoxas bizantinas orientales y greco-católicas conmemoran la Huida a Egipto el 26 de diciembre.Descanso en la huida a Egipto: pausa obligada para que el Niño se amamante.En Egipto se encuentra un viejo sicomoro llamado "El árbol de la Virgen".La tradición recoge que la Virgen María descansó en él durante su huida a Egipto.Milagro de la palmera: durante el viaje la familia pasa hambre y sed.Jesús ordena al árbol que incline sus ramas, y se cumple su voluntad, permitiendo recoger sus frutos.En este momento aparecen tres ángeles a los que Dios Padre ha encargado llevarle al Paraíso una palma de la palmera generosa.A partir de la siglo XV en los Países Bajos, el tema no bíblico de la Sagrada Familia descansando en el viaje, el Descanso en la huida a Egipto se hizo popular, a finales del siglo XVI quizás más común que la familia viajera original.En el Milagro del maíz, los soldados perseguidores interrogaron a los campesinos, preguntándoles cuándo había pasado por allí la Sagrada Familia.El tema fue especialmente popular entre pintores románticos alemanes, y más tarde, en el siglo XIX, fue uno de los temas del Nuevo Testamento que se prestaron al tratamiento orientalista.Quién sería esa señora que a mí me hizo esta merced Que me dio vista en los ojos y en el corazón también.También la poetisa uruguaya Juana de Ibarbourou (1892-1979) puso en verso la huida a Egipto, centrando su reflexión en el «burrito santo» que habría cargado a María y al niño.: nunca en tus pupilas asomó el vislumbre más fugaz y leve del orgullo atroz;y eso que una noche sin luna ni estrellas por largos caminos dejaste tus huellas ¡llevando la carga sagrada de un Dios!
Rembrandt
, 1627 (la escena transcurre de noche, lo que permite localizarla al principio de la huida, según el relato evangélico).