Ruperto de Salzburgo o Ruperto de Worms (o Ruprecht, Hrodperht, Hrodpreht, Roudbertus, Rudbertus, Robert) (660?
[2] La tradición dice que Ruperto pertenecía a la familia real de los merovingios.
Bautizó al duque Teodoro de Baviera,[3] que le dio autorización para continuar evangelizando el territorio, en el que bautizó a otros nobles.
De ahí fue a Altötting y convirtió a sus habitantes, y continuó su tarea misionera por la cuenca del Danubio.
Iba introduciendo, además de la religión, la educación y otras reformas.