El historiador Francisco González Guinán (1841-1932), afirma que tanto Olivo como su hermanastro Hermógenes López participaron desde jóvenes en política y que militaron en el Partido Liberal durante las presidencias alternativas de José Tadeo Monagas y José Gregorio Monagas, período conocido en la historia de Venezuela como El Monagato (1851-1858).
Poco después, en ese mismo mes, Olivo derrotó a las tropas del general rebelde Justo Rufino Lugo en Yaracuy[11] y a finales de año participó en una nueva campaña sobre las costas de Puerto Cabello.
Entre los rebeldes hechos prisioneros por el ejército gubernamental se encontraba el Comandante Diego Beluche, amigo personal de Olivo.
Éste, mediante una heroica intervención, impidió que una soldadesca fuera de control matara a Beluche.
Olivo es llamado a Valencia para proteger la ciudad, que resiste y no es tomada por los federalistas.
[24] La ciudad es, sin embargo, sitiada por el ejército del nuevo gobierno federal y las fuerzas de la resistencia finalmente abandonan la plaza en la noche del 7 de octubre, haciéndose a la mar en los vapores Venezuela y Orinoco.
[36] Tras la victoria, se inicia el largo mandato de Antonio Guzmán Blanco, periodo conocido como el Liberalismo Amarillo.
En el nuevo gobierno de Antonio Guzmán Blanco, Olivo y otros militares azules se declaran en rebelión.
A partir de ese momento, la resistencia en toda la región adquiere grandes proporciones.
[42] Olivo lo entiende así y además concibe un plan muy preciso que ya había probado su efectividad en otros conflictos civiles en Venezuela: concentrar todas las fuerzas dispersas en un solo cuerpo con el objeto de enfrentarse al ejército del Gobierno.
La plaza cae a su llegada cuatro o cinco días después, sin apenas ofrecer resistencia.
Pero al día siguiente, una parte importante del ejército gubernamental, al mando de Joaquín Crespo, que en la madrugada del día 5 había cruzado sigilosamente el río Apure por una zona de aguas bajas conocida como Caño Amarillo, toma la ciudad por la retaguardia.
Las fuerzas de Olivo y Herrera, sorprendidas, deciden retirarse hacia el sur, buscando los pasos del río Arauca.
El General Herrera, antes del combate final, logra cruzar el Arauca y huir hacia Colombia con 300 hombres; pero Olivo, que defiende la retaguardia, es acorralado contra el río en el Paso Real por las superiores fuerzas del General Joaquín Crespo, que ascendían a 2.000 efectivos.
Decide entonces lanzarse al agua junto con 300 de sus hombres en medio del fuego enemigo.
El general conservador Adolfo Antonio Olivo fue descrito por el historiador liberal González Guinán como un hombre "caballeroso y apuesto" capaz de actos nobles e incluso heroicos por parientes como Hermógenes López o amigos como Belouche, a pesar de militar estos en el ejército contrario.