Un virreinato es una división territorial relativamente autónoma de un reino; es decir, un Estado monárquico gobernado por un virrey.[2] A mediados del siglo XVI, se introdujo en la Corona de Aragón la palabra virrey derivada de la palabra "visrei" ya utilizada al menos en el siglo XV[3] y del catalán pasaría al castellano "visorey".En 1511, según lo dispuesto en las Capitulaciones de Santa Fe, fue nombrado virrey Diego Colón, quien sí le dio importancia a dicho título.Existió una evolución en la Corona Española respecto a la calidad de la persona que debía ocupar dicho cargo.Tales declaraciones no habrían sido cuestionadas por representantes americanos en las Cortes de Cádiz, como el peruano Vicente Morales Duárez.Sin embargo, aún existirían debates historiográficos al respecto, entre quienes (la escuela nacionalista o colonialista) dicen que esto solo eran posturas de iure en el papel, y no una realidad de facto en las dinámicas sociales (la escuela revisionista).[14] En el Imperio chino, el virrey era un funcionario del gobierno central con poder delegado por el emperador para gobernar una o más provincias.Cada provincia contaba con su propio gobernador provincial, que estaba a su vez subordinado al virrey.
Virreinatos, Capitanías Generales y provincias españolas en América hacia 1800.