[15] Inició su carrera política cuando fue elegido presidente municipal de Cuatro Ciénegas, en la época del gobernador José María Garza Galán, pero debido a que sus relaciones con él eran pésimas, renunció.Por tal motivo, cuando Garza Galán intentó reelegirse, Carranza se rebeló participando políticamente en su contra.En un principio no se comprometió con Francisco I. Madero, pues continuó con la esperanza de que algún día el general Bernardo Reyes, quien lo había apoyado en su lucha contra Garza Galán, regresara al país a suceder a Porfirio Díaz.Aunque no llegó a penetrar el estado como rebelde, fue designado por Francisco I. Madero como gobernador de Coahuila.Ahí reorganizó su ejército con el apoyo de los generales Álvaro Obregón, Pablo González Garza, Cándido Aguilar, Salvador Alvarado, Jacinto B. Treviño, Francisco Coss, José de Jesús Madrigal Guzmán y otros.La misión era destituir a Huerta, por ser ilegítimo y sobre todo controlar el ingreso de armamento.Este tipo de mensajes cifrados fueron muy comunes durante el proceso revolucionario: todas las fracciones en pugna los utilizaron, pues si alguien los interceptaba podía apresurar una movilización e intervenir en su contra.El criptograma continua: “[...] bastante este Estado 48.55.25.11.15.77.69 [...]” y finalmente dice: “me permito darle esta información por lo que tuviera aprovecharla.Madero empleó ese número en cartas personales para hablar precisamente de Estados Unidos.Si esta hipótesis se aplicara a Carranza, se podría explicar que desde finales de 1915, existe correspondencia proveniente de Estados Unidos que reconoce al general mexicano como presidente.La debilidad del zapatismo permitió que se tomara la Ciudad de México, y fue este triunfo, el que le trajo el reconocimiento oficial del gobierno estadounidense, en octubre de 1915.Los requisitos de representación eran los mismos de la Constitución de 1857, solo que se incluía, el no haber ayudado con las armas o desempeñando un empleo público con los gobiernos o facciones hostiles a la causa constitucionalista (excluyéndose así el ideal villista y zapatista, así como otros grupos antagonistas tales como reyistas y maderistas).Solo la minoría tenía experiencia parlamentaria, pues ya antes habían pertenecido a una agrupación llamada “Bloque liberal renovador”, que años atrás habían legitimado el régimen huertista perteneciendo a la XXVI Legislatura.A pesar de los requerimientos previos, todas estas diferencias provocaron grandes problemas y polémicas durante las sesiones.Para la mayoría parlamentaria, no expresaba los ideales por los que ellos (ni el pueblo) habían luchado: la visión carrancista era insuficiente en temas de suma importancia para los diputados revolucionarios, obreros, campesinos y militares que se habían solidarizado en cierta forma con villistas y zapatistas durante la Convención.A raíz de esto, exigieron al Primer Jefe, se respetaran e incorporaran las disposiciones que luego serían conocidas como derechos o garantías sociales.Si bien, tanto zapatistas como villistas no podían formar parte del Congreso, con la constitución se manifiesta la enorme influencia ideológica luego de la Convención.A pesar del aparente optimismo con respecto al nuevo gobierno, los logros de Carranza durante su presidencia fueron apenas unos cuantos y no se vieron demasiados cambios.Por su parte, el general Manuel Peláez se encontraba encuartelado por la zona de la Huasteca; mientras que los hermanos Saturnino, Cleofás, y Magdaleno Cedillo habían conformado una considerable oposición dentro de San Luis Potosí; en tanto que José Inés García Chávez dirigía la resistencia contra Carranza desde Michoacán.Zimmermann prometía en ese telegrama el ayudar a México a reconquistar el territorio perdido durante la invasión estadounidense de 1846, particularmente los estados de Texas, Nuevo México, y Arizona.Carranza mantuvo una actitud displicente ante los artículos constitucionales 3 y 130, de corte anticlerical, mismos ante los cuales expresó su oposición durante los trabajos del Congreso Constituyente."[22] Carranza propuso una enmienda para modificar aquellos artículos constitucionales, pero su propuesta fue rechazada por las legislaturas locales y por dos tercios del Congreso.[23] Victoriano Huerta había llegado a la presidencia gracias a las intrigas del embajador estadounidense Henry Lane Wilson en febrero de 1913, que derivaron en el derrocamiento del presidente Francisco I. Madero y el vicepresidente José María Pino Suárez, en un golpe de Estado conocido como la Decena Trágica.[29][36] En 1920 buscó imponer como presidente de la República a un civil, el ingeniero Ignacio Bonillas, pues ya para entonces era contrario a la ideología política mostrada por Álvaro Obregón y se encontraba desilusionado por la actitud de Pablo González Garza.
Venustiano Carranza (Centro) en La Cañada,
Querétaro
, el 22 de enero de 1916.
Carranza en la portada de Les Hommes du Jour, Francia, 1916.
Venustiano Carranza en la silla presidencial, en 1917.
Carranza y Álvaro Obregón, a su derecha (1914)
General Álvaro Obregón, que permaneció leal a Carranza hasta 1920