Transmisión de los textos clásicos griegos

La filosofía griega clásica consistía en varias obras originales que iban desde las de la Antigua Grecia (por ejemplo, Aristóteles) hasta las de los eruditos grecorromanos del Imperio romano clásico (por ejemplo, Claudio Ptolomeo).Se tradujo al latín toda la gama de clásicos griegos, incluyendo a historiadores, poetas, dramaturgos y filósofos no aristotélicos.[5]​ El siríaco juega un papel importante en la crítica de los textos modernos, incluso hoy en día.[5]​ Las traducciones al siríaco jugaron un papel importante para la posterior recepción en el árabe.Estos traductores de siríaco eran en su mayoría nestorianos y cristianos jacobitas, que trabajaron en los doscientos años siguientes al período abasí.Además de estas avanzadas obras filosóficas, Boecio también tradujo importantes textos griegos para los temas del quadrivium.Aunque la contribución de Guillermo al redescubrimiento de Aristóteles, en el siglo XIII, no fue tan significativa como a veces se afirma, su trabajo sin duda ayudó a formar una imagen más clara de la filosofía griega, y en particular de Aristóteles, que la que ofrecían las versiones árabes en las que se habían basado anteriormente, y que habían distorsionado u oscurecido la relación entre los sistemas filosóficos platónico y aristotélico.Si se conocieron, lo más probable es que fuera durante los tres o cuatro años que el Aquino estuvo trabajando en Orvieto, es decir, no antes de la elección del Papa Urbano IV en agosto de 1261, quien invitó a Aquino a servir en la corte papal, y no después de 1265, cuando Aquino partió hacia Roma.Sus traducciones y comentarios sobre estas ideas se abrieron paso a través del Occidente árabe hasta España y Sicilia, que se convirtieron en importantes centros para esta transmisión de ideas.[17]​ En este punto comenzaron a encontrarse con las ideas griegas, aunque desde el principio, muchos árabes fueron hostiles al aprendizaje clásico.[18]​ Debido a esta hostilidad, los califas religiosos no pudieron apoyar las traducciones científicas.El segundo Califa abasí Al-Mansur trasladó la capital de Damasco a Bagdad.Al-Mansur ordenó traducir al árabe este rico fondo de literatura mundial.Después de estudiar en Bagdad con Yuhanna, visitó Alejandría y regresó, no solo con la formación impartida en lo que entonces era la primera escuela de medicina, sino con un buen conocimiento del griego que empleó para hacer traducciones en siríaco y árabe.En su lugar, las obras filosóficas y científicas fueron casi todo el foco de la traducción.Su síntesis de la filosofía griega con las creencias islámicas encontró mucha oposición, y en un momento dado fue flagelado por aquellos que se oponían a sus ideas.Siempre que se encontraba en un punto muerto, abandonaba las ideas griegas en favor de la fe islámica.[21]​[27]​ Después de este período, la filosofía griega entró en un declive en el mundo islámico.Teólogos como Al-Ghazali argumentaban que muchos reinos de la lógica sólo funcionaban en la teoría, no en la realidad.[28]​ Ibn Sina, también conocido como Avicena, más tarde influiría fuertemente en el pensamiento filosófico, teológico y científico europeo, llegando a ser conocido como «el científico más famoso del Islam» por muchos historiadores occidentales.[21]​ Mientras que las ideas griegas penetraron gradualmente en el mundo islámico, las conquistas de los musulmanes se extendieron al continente europeo.España fue conquistada por los árabes alrededor del 700 d. C., llegando incluso hasta Poitiers, Francia, en el 732 (Batalla de Tours).[29]​ Al igual que los libros, muchos estudiosos árabes que habían estudiado las ideas griegas en el este, por ejemplo, Mohammed ibn Abdun al-Jabalin y 'Abdu'l-Rahman ibn Ismail vinieron a España e introdujeron muchas ideas sobre medicina así como varios de los trabajos de Aristóteles y Euclides.Ibn Bayya (conocido como Avempace) e Ibn Rushd (conocido como Averroes) estuvieron entre los otros filósofos famosos de España que fomentaron la expansión de las ideas griegas en la medicina y la filosofía.Averroes redescubrió al "verdadero" Aristóteles traduciendo textos claves reintroduciéndolo a la España árabe.La pequeña y poco escolar población de los reinos cruzados contribuyó muy poco a los esfuerzos de traducción, hasta que la Cuarta Cruzada se llevó la mayor parte del Imperio bizantino.Los sicilianos, sin embargo, estaban menos influenciados por los árabes y en cambio se destacan más por sus traducciones directamente del griego al latín.[40]​ Sin embargo, después de la Reconquista del siglo XII, España se abrió aún más para los estudiosos cristianos, que ahora podían trabajar en territorio religioso "amigo".[38]​ Los extranjeros llegaron a España para traducir desde toda Europa,[41]​[42]​ y Toledo se convirtió en un centro para estos viajeros, ya que muchos de sus ciudadanos escribían diariamente tanto en árabe como en lenguas de base latina.[47]​ Incluso los bizantinos experimentaron un resurgimiento aristotélico a mediados del siglo XII, y reunieron hombres de Italia también.
Las ideas de Aristóteles y Platón , mostradas en La escuela de Atenas de Rafael , se perdieron en parte para los europeos occidentales durante siglos.
El Califa abasí Al-Mamín envía un enviado al emperador bizantino Teófilo .
Representación árabe medieval de Aristóteles enseñando a un estudiante.
Averroes
El erudito medieval cristiano San Jerónimo (aquí representado por Domenico Ghirlandaio , iglesia de Ognissanti , Florencia ) estaba en contra de muchas ideas griegas.
Detalle de un manuscrito iluminado del siglo XIV de la traducción de los Elementos de Euclides atribuida a Adelardo de Bath