Su obra fue muy influyente en su día, ante la dificultad para acceder a las fuentes originales y fue un importante apoyo para el desarrollo de la filosofía medieval, particularmente para el Tomismo.Aún hoy en día sus obras son tenidas en consideración por los académicos actuales.Aristóteles se convirtió tras todas estas traducciones en una fuente de errores teológicos y filosóficos a merced de sucesivas malintepretaciones.En el siglo XIV Henricus Hervodius reconoció el valor de su durabilidad: eran literales (de verbo in verbo), fieles al espíritu del griego y sin elegancia.Su obra se expuso en Roma renacida: La biblioteca vaticana y la cultura renacentista en la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos en 1993.