Sixto Rojas Acosta

[1]​ Más tarde volvió a casarse con Thelma Aguilar, con quien tuvo once hijos.[1]​ Recibió una sólida educación académica, tras la cual decidió regresar a Iquique para desarrollar su carrera artística, permaneciendo allí el resto de su vida salvo por un breve regreso a Santiago entre 1918 y 1920 o 1921.[1]​ Entre 1905 y 1906 pintó los interiores del Teatro Municipal de Iquique,[1]​ el cual desde 1977 es considerado monumento nacional.Destacan sus estucos, la madera policromada, pintada a mano, y los óleos de sus paredes del interior,[6]​ incluyendo «Las majas».[2]​ A mediados de 1916, viajó a Pisagua para decorar el cielo de la Sala Mayor del Teatro Municipal,[7]​[2]​ con querubines representando la danza, el teatro, la pintura y la música,[7]​ tal y como ya había hecho años antes en el Teatro Municipal de Iquique.Luego realizaría trabajos análogos en la filarmónica y en el teatro de la oficina salitrera Agua Santa.[9]​ Para su confección, el artista utilizó modelos en greda de tamaño natural, para luego obtener los moldes y realizar las figuras definitivas en vaciado de yeso macizo.[10]​ Para la Compañía de Tabacos, gerenciada por Manuel Montes y ubicada en la calle Eleuterio Ramírez con San Martín, desarrolló toda la publicidad del Cigarro Popular, que incluyó la creación del muñeco Pipo, que representaba a un niño fumador.Además pintó tres cuadros que representan damas típicas españolas de la época: La maja, La sevillana, y La charra.[1]​ Ya finalizando su trabajo artístico en Iquique, en 1936 pintó para su hija Graciela un óleo del Sagrado Corazón de Jesús.Esta es la única pintura que conserva su familia, junto a algunos bocetos y diseños.[1]​ Entre finales de 1938[7]​ y 1939[1]​ regresó a Pisagua, acompañado por su hijo Raimundo[1]​ y contratado por el alcalde de la época, Miguel Torres Campos,[7]​ para retocar su obra realizada en el cielo del Teatro Municipal varios años antes.[12]​ Esa misma tarde, fue llevado junto a José Brigg, presidente del directorio, por la calle Barros Arana, bajo estado de sitio y toque de queda,[2]​ para su detención en el Hipódromo, donde al no ser reconocido lo dejaron en libertad.[3]​ Desde 2005 la Municipalidad de Iquique otorga la beca artística «Sixto Rojas Acosta» a personas entre 8 y 28 años para actividades de perfeccionamiento y profesionalización artística.[17]​ Este monumento, construido por la Municipalidad, es una réplica[3]​ del mausoleo inaugurado con su participación en 1911.
El interior del Casino Español de Iquique aún conserva obras del pintor
Cúpula del Casino Español en la que trabajó el artista
Placa conmemorativa en el Cementerio N.º 1 de Iquique