Los realistas empezaban a perder el absoluto apoyo popular que tuvieron alguna vez.
[10] Diversas partidas patriotas habían nacido durante los años anteriores, ninguna superaba el millar de combatientes en sus operaciones, pero tenían un fortísimo apoyo popular de los llaneros y refugiados.
[22] El 27 llegaban a Angostura, villa que encontraban con serios problemas de abastecimiento.
[28] Se insiste a Brión venir a la provincia, se construye una batería en La Punta, río debajo de Angostura, para estorbar a la escuadrilla realista en la zona y manda establecer un astillero para construir flecheras y mejorar el apostadero en Puerto de las Tablas, en la boca del Caroní.
[31] Esto era clave porque el continuo paso de navíos permitía traer carnes y armamentos a los defensores.
[8] Los monárquicos se habían comido hasta los cueros por el hambre, su moral estaba por los suelos.
[9] Presas del pánico, los navíos fugitivos empezaron a dispersarse en el delta.
[34] Lograron escapar los barcos de guerra donde estaban Latorre, Fitzgerald, sus oficiales y soldados.
[38][34] El 19 de julio, Bolívar entraba en la urbe y encontraba únicamente algunos famélicos.
[39] Se volvía imprescindible aliarse con José Antonio Páez para atraer a los llaneros a su causa,[41] conquistar Apure y Barinas y avanzar al interior de la Nueva Granada.
[40] Los patriotas controlaban una provincia de 30.000 habitantes,[42] pero las principales ciudades y el resto del país seguían en manos realistas.
[43] A pesar de que la guerra había arruinado la región, esto no les impedirá movilizar un ejército mal armado y hambriento[n 4] de 3.000[44] a 3.500[42] efectivos, la mayoría eran infantes descalzos armados solo con lanzas, arcos y flechas.
[45] Durante esta campaña, Bolívar impone su mando definitivamente sobre los demás caudillos patriotas, todos personajes con victorias en su haber y numerosos seguidores.
[46] Este último estaba conspirando en Maturín, pero tras una serie de encontronazos con el coronel Andrés Rojas marcha a Cumanacoa, donde había numerosos partidarios de Mariño pero estos no le apoyaron.
[48] El poder político y militar patriota quedaba definitivamente unificado en torno a la persona del Libertador.