Fuerza de Defensa de Sudáfrica

[1]​[2]​[3]​ La SADF se organizó para realizar una doble misión; combatir a la insurgencia en todas sus formas y mantener una fuerza militar convencional que pudiera defender las fronteras de la unión, organizando expediciones punitivas y realizando operaciones de represalia y castigo colectivo, según fuera necesario.[4]​ El ejército estaba formado principalmente por sudafricanos blancos, que eran los únicos sujetos al servicio militar obligatorio.A partir de 1971, se formaron varios batallones negros en el Cuerpo de Infantería y Servicio sobre una base tribal, la mayoría de los soldados negros sirvieron en estos batallones tribales exclusivos, que tenían suboficiales negros pero oficiales comisionados blancos.El primer personal negro fue aceptado en rangos comisionados solo a partir de 1986, y luego solo para servir a soldados y suboficiales negros.Organizaciones como End Conscription Campaign se opusieron al reclutamiento, pero en general, la moral de los blancos se mantuvo alta, como lo indican los pocos reclutas juzgados por delitos disciplinarios graves.[9]​ Durante el apartheid, las tropas armadas de la SADF se utilizaron para sofocar la oposición al gobierno de la minoría, a menudo apoyando directamente a la policía sudafricana.Así mismo, varias naciones occidentales como Israel colaboraron con la industria sudafricana en la transferencia de tecnología para modernizar modelos obsoletos y perfeccionar la fabricación de componentes.Así el A41 Centurión pasó a ser el Olifant MK 1A con apoyo israelí y el Mirage III se modernizó al Atlas III también con apoyo de esa nación.En los años 70 Sudáfrica contaba con suficiente uranio proveniente, entre otros lugares, de Namibia y varias centrales nucleares con las que pudo obtener suficiente uranio y plutonio como para fabricar armas nucleares.Al parecer, el 22 de septiembre en 1979 detonó su primer artefacto en una isla del océano Índico, extremo del que no hay pruebas pero los indicios apunta a Sudáfrica (véase en Incidente Vela).A medida que Sudáfrica se involucró cada vez más en la Guerra de la frontera en el África del Suroeste (la actual Namibia) y Angola, la Armada sudafricana comenzó a reajustar su perspectiva y organización internacionales anteriores.La Armada de Sudáfrica mantuvo el control marítimo y brindó un valioso apoyo a las fuerzas terrestres sudafricanas.El buque se utilizaba principalmente para transportar vehículos militares y equipamiento pesado.La FDS, en 1958 contaba con unos 20.000 miembros, creció hasta casi 80.000 hombres en las dos décadas siguientes.Durante los meses siguientes, el Ejército se vio involucrado en operaciones de combate por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, enfrentándose a grupos del SWAPO que se infiltraban en el suroeste de África.Por ejemplo, el Comando del Extremo Norte tenía la 73 Brigada Motorizada dentro de su área.Durante la década de 1980, los requisitos legales para el servicio nacional eran registrarse para el servicio a los dieciséis años y presentarse al servicio cuando era llamado a filas, lo que generalmente ocurría en algún momento después de que un hombre cumpliera los dieciocho años o al dejar la escuela secundaria.Las obligaciones de servicio nacional podían cumplirse mediante el servicio militar activo durante dos años y sirviendo en las reservas, generalmente durante diez o doce años.En ella la superioridad sudafricana quedó demostrada por varias operaciones en territorio enemigo.Unidades helitransportadas atacaron bases de SWAPO en Zambia y Angola.En ataques más grandes sus unidades mecanizadas invadieron Angola desde casi el primer momento de su independencia y llegaron incluso a asediar su capital, Luanda, hasta que la intervención cubana y la negativa de Estados Unidos a proporcionarles más armas si seguían avanzando les hicieron retroceder.La intervención fue más peligrosa de lo que suponían los sudafricanos porque a pocos kilómetros de Cassinga estaba acantonado un contingente cubano del que no tenían constancia.La ofensiva empezó bien, el ejército angoleño consiguió penetrar cientos de kilómetros sin que la UNITA pudiera detenerlos.Sudáfrica decidió intervenir en apoyo a Savimbi y lanzó sus fuerzas contra los flancos de las FAPLA, que se vio sorprendida y no tuvo más remedio que replegarse al norte.Las fuerzas sudafricanas apoyadas por la UNITA se lanzaron entonces a una contraofensiva que les hizo recuperar territorio de forma rápida y contundente.Cuba puso como condición tener el control de las operaciones (en detrimento de los generales soviéticos) y respondió enviando a la zona efectivos que triplicaban a las fuerzas sudafricanas.Sin apoyo aéreo, las fuerzas sudafricanas no tuvieron más remedio que replegarse, esta vez perseguidas de forma coordinada por angoleños y cubanos.Para garantizar la superioridad aérea, Cuba construyó un aeropuerto en la aldea de Cahama que permitía a sus aviones atacar las bases sudafricanas en Namibia.Durante la Guerra de la Frontera, la FAS perdió un total de 22 aviones debido a la acción enemiga en el campo de batalla, mientras que unos 11 aviones se perdieron debido a errores del piloto, o a un mal funcionamiento del avión.
Un caza Dassault Mirage III del segundo escuadrón de la FAS.
Sistema de misiles de defensa antiaérea Crotale .