Aunque reconoce que Charles Dullin fue su verdadero maestro, también fue discípulo de Étienne Decroux, que al finalizar la Segunda Guerra Mundial, presenta junto con él la llamada pantomima de estilo, que se reduce a la más sencilla expresión.
En la Comedie Francaise conoce en 1936 a Madeleine Renaud con quien se casa en 1940, después de la guerra forman su propia Compañía Renaud-Barrault de ilustre trayectoria en París[1] y en giras internacionales por Europa, Estados Unidos y América del Sur, visitando Buenos Aires en tres oportunidades: 1950, 1954 y 1961.
Pronto le dan un papel en el clásico del cine Les enfants du paradis[2] de Marcel Carné, junto a Arletty, Pierre Brasseur y María Casares, consagrándose como el payaso Baptiste y luego en el Teatro Marigny encarna un Pierrot, recreación de Baptiste un asesino de comerciante de telas.
[3] En 1975 la editorial Fundamentos, publica su libro de memorias, Mi vida en el teatro.
Ser capaz de leer exactamente lo que está escrito, sin omitir nada de lo escrito y al mismo tiempo sin añadir nada propio.